Una importante baja en la compra de bonos pediátricos es las que se ha visto en los últimos meses, en medio de la alerta sanitaria por coronavirus que afecta al país.

Según un estudio recogido por LUN del centro IMED, empresa que se dedica a emitir bonos, en la primera semana de junio se realizaron 220.000 consultas médicas en todo el país; es decir, 62% menos que las 570.000 que se hicieron a la fecha en 2019.

Es por ello, que muchos padres han decidido visitar junto a sus pequeños al pediatra de manera remota, y tomar ciertos aspectos básicos del crecimiento del bebé, como peso y estatura, por ellos mismos.

Ante esta situación, varios especialistas entregaron datos para tomar de manera óptima estas variables y estar atento a otras señales, ya que durante los primeros meses se vuelven esenciales para evaluar el crecimiento de los pequeños, siendo más relevante en los recién nacidos, puesto que pueden bajar de peso después del parto.

“Hoy es mejor no exponer a un bebé innecesariamente, por lo que si tienen una balanza de baño en la casa también puede servir: se pesan juntos, luego uno solo y luego le restan el peso propio. Obviamente no va a ser la evaluación más precisa del control sano, pero peor es nada”, explicó al citado medio la pediatra Ana María Bravo, jefa de la Central de Operaciones Help.

No descuidarse

Sin embargo, y pese a estas recomendaciones, la pediatra bronco-pulmonar de Clínica Vespucio, Gema Pérez, indicó que los padres deben estar alerta si la guagua presenta ciertas señales, además de tener al día sus controles médicos.

“Los primeros días son claves y el niño debe ser revisado de forma presencial; al quinto y octavo día se cierra el ductus arterioso y aparecen las cardiopatías congénitas: entonces ese control sano se debe hacer sí o sí”, explicó.

Y agregó que: “No tenemos cómo consultarle el corazón por telemedicina, podemos dirigir un poco a los papás, pero no es lo mismo”, concluyó Pérez.