Hace unas semanas los medios de comunicación informaban de una de las peores masacres de Estados Unidos, específicamente en Las Vegas, cuando un hombre identificado como Stephen Paddock disparó desde el piso 32 del hotel Mandalay Bay hacia el concierto country Route91Harvest.

Tras el ataque quedó un total de 59 víctimas fatales y alrededor de 200 heridos, entre ellos la contadora de 27 años, Tina Frost, quien permaneció en coma en el Sunrise Hospital and Medical Center de Las Vegas hasta el viernes.

La joven asistió al concierto junto a su pareja, Austin Hughes, quien apenas notó que su novia había sido herida por una de las balas, la llevó a primeros auxilios, luego fueron ayudados por un extraño y más tarde fue llevaba de urgencia al hospital.

Tina Frost | Facebook
Tina Frost | Facebook

La bala la hirió su ojo derecho y quedó alojada en su cerebro pulverizada en varios trozos. De acuerdo a lo señalado por el diario Las Últimas Noticias, algunos fueron sacados, pero no todos debido a la hinchazón con la que quedó el órgano.

Para tratar esto, los médicos decidieron sacar una pedazo de hueso de su frente para poder darle espacio al cerebro hinchado. Además, se informó que la joven lamentablemente perdió su ojo derecho.

Pero a pesar de las mala noticias, Tina ha demostrado pequeñas mejoras que aumentan la esperanza de su recuperación a pesar de su gravedad.

Los doctores me dijeron que un 90% de quienes recibían un disparo como el de ella morían. Bueno parece que ella está dentro del 10%. Lento, pero seguro está haciendo procesos“, fueron palabras de Rich Frost, el papá de Tina a Las Vegas Review Journal.

Por su parte, una de sus mejores amigas, Pam Ostiguy habló de su buen proceso de recuperación: “A veces ella da golpecitos cuando hay música y también dio sus primeros pasos el viernes con la asistencia de las enfermeras. Fueron tres pasos a la silla y tres pasos de vuelta a la cama. Obviamente está ansiosa por moverse de nuevo. También respiró sola por seis horas. Estamos muy orgullosos de nuestra Tina“.

Cabe señalar que debido a los altos costos del tratamiento, su madre y amiga le crearon una cuenta en Go Fund Me para recaudar dinero y ayudar con los gastos. En un principio se quería reunir 50 mil dólares (51 millones de pesos chilenos), pero en sólo 13 días ya llevan más de 550 mil (341 millones).