Hace algunos días se dio a conocer el caso de una pareja que decidió tener a su bebé en su hogar en la zona sur de Santiago, sin embargo, a las pocas horas falleció y el Ministerio Público inició una investigación en su contra por infanticidio.

Y es que el problema se presentó tras realizar un parto alternativo denominado Lotus, y que cada vez es más popular entre las mujeres.

Este consiste en no cortar el cordón umbilical, dejando al bebé y la placenta conectados a la madre por un período de hasta dos semanas, para evitarles el ‘trauma’.

De acuerdo a este procedimiento el cordón debería caerse de forma natural, aunque este proceso puede durar hasta 10 días.

Sus adeptos señalan que además de hacer una transición más amable del recién nacido a su nuevo hábitat, se absorben más nutrientes y sangre de la placenta. Sin embargo, médicos han advertido de los riesgos del procedimiento ya que puede generar infecciones en el bebé, según señaló el medio británico Daily Mail.

Incluso, creen que los recién nacidos son sometidos a un estrés innecesario cuando se les corta el suministro de sangre que fluye a través del cordón umbilical desde la placenta. Y de acuerdo con esta ideología, esto significa que los bebés entran al mundo por su propia cuenta, además de permitirles obtener los beneficios restantes de la placenta. “Una vez que se entrega el bebé y la placenta, la bolsa se coloca en un recipiente y se transporta con el bebé”, señalan.

El Colegio Británico de Obstetras y Ginecólogos expresó sus reparos en torno al método, después de que un pequeño número de mujeres en el Reino Unido optara por tener hijos por esta vía.

Si bien en Chile por el momento se sabe poco, en países como Estados Unidos, Canadá y Australia ya es bastante popular.

De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), “retrasando el pinzamiento del cordón se consigue mantener el flujo sanguíneo entre la placenta y el recién nacido, y eso puede mejorar la dotación de hierro del niño incluso hasta los seis meses de vida. Este efecto puede ser especialmente importante para los lactantes que viven en entornos con pocos recursos, en los que hay un menor acceso a alimentos ricos en hierro”.

Sin embargo, aclara que lo recomendable es “el pinzamiento y corte tardío del cordón umbilical (aproximadamente entre uno y tres minutos después de dar a luz) en todos los nacimientos, al tiempo que se inician simultáneamente los cuidados básicos del recién nacido”.

¿Qué te parece este método? ¿Intentarías hacerlo?