Cuando Eric Hertlein fue a visitar a su abuela en Kansas, se llevó una sorpresa que se volvió viral en redes. Supuestamente la mujer había rescatado a tres gatos, pero en realidad uno de ellos no se parecía en nada a un felino.
Al mirar a las mascotas de cerca, el joven notó una gran diferencia. Sin siquiera saberlo, la abuela había estado cuidando a una pequeña zarigüeya.
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“Le dije que no era lo que ella pensaba que era”, agregó el joven, tal y como consigna el sitio BioBioChile.
“Ella me aseguró que era uno de sus gatos… Me reí por unos cinco minutos”, señaló Eric a la web dedicada a noticias de animales The Dodo.
“No se dio cuenta de lo que me estaba riendo hasta que comencé a señalar la nariz puntiaguda y la cola delgada. Ella no se dio cuenta de que no era un gato”, añadió el joven.
“Tete” era el nombre con el que la abuela había bautizado al supuesto gato. Sin embargo enterarse de que era una zarigüeya no cambió en nada las cosas.
“¡Bueno, todavía no me ha molestado, así que estoy de acuerdo con que él esté aquí!”, exclamó la mujer.
Al parecer, el pequeño animal había estado durmiendo en la casa de la abuela desde que era bebé. Estar en contacto con los gatos hizo que imitara su comportamiento y dejara de lado sus conductas salvajes.
“A mi abuela le encantan los animales y los cuida cuando puede. Es algo que simplemente te motiva a ser mejor y a tratar a otros seres mejor también”, expresó Eric.
Cabe destacar que las zarigüeyas son uno de los marsupiales más antiguos del planeta y se caracterizan por tener un comportamiento bastante imprevisible, algo nervioso y activo.
