En completo hermetismo se ha mantenido todo lo relacionado al embarazo de Meghan Markle, que hace pocos días hizo noticia por realizar su baby shower en la ciudad de Nueva York (Estados Unidos).

Pero las reglas son claras, el protocolo de Buckingham impide que el sexo y nombre de los bebés Windsor sean desvelados antes de su nacimiento, según consigna la revista Vanity Fair.

Lo cierto es que la espera la realiza todo el pueblo británico, quienes en el último tiempo parecen balancearse más por la posibilidad de que el nuevo integrante de la familia real sea… una niña.

Las apuestas se inclinaron a esta posibilidad luego de que Jean-Georges, chef residente del lujoso hotel The Mark (donde se realizó el baby shower con amigos cercanos a la actriz), compartió en su Instagram imágenes del evento y un video en sus stories.

Las imágenes mostraron la mesa de la fiesta, repleta de pasteles, macarons de Ladurée y otros dulces en tonos rosas y morados, por lo que se ha especulado que el primer bebé de la duquesa de Sussex será mujer.

Pero este detalle se suma a lo visto por los paparazzi, quienes el día de la celebración en la “gran manzana” notaron que predominaban los tonos rosa en los arreglos florales, adornos y regalos.