El FBI es uno de los centros de investigación criminal más destacados y reconocidos del mundo, sin embargo, ellos también cometen errores.

Así lo confirmaron el pasado viernes, luego que dieran fin a la búsqueda de Donald Eugene Webb, un hombre que se encontraba prófugo de la justicia hace más de 37 años. No obstante, el lugar donde se encontraba los tomó por sorpresa.

Webb, quien era acusado de asesinar a Gregory B. Adams, un jefe de la policía de Pensilvania, fue encontrado nada menos que en su casa, ubicada en Boston, Estados Unidos.

Sin embargo, la policía no halló precisamente lo que esperaba. Después de casi 4 décadas, el FBI encontró sólo su cuerpo, el cual estaba enterrado en el patio de su vivienda.

Donald Eugene Webb | FBI
Donald Eugene Webb | FBI

De acuerdo a la información entregada por el Washington Post, Donald murió en 1999 y pasó años ocultándose de la justicia en una habitación secreta de su casa.

La entrada de la pieza estaba camuflada al interior de un clóset, lugar en donde se encontró el bastón que ocupaba el fugitivo, quien permaneció por más de 25 años en la lista de los “10 más buscados” por el FBI, según consigna BioBioChile.

Donald Eugene Webb | FBI
Donald Eugene Webb | FBI

El hallazgo se concretó gracias a la ayuda de su viuda, Lilian Webb, quien le informó a la policía el paradero de su marido, logrando así un acuerdo con las autoridades estatales para no ser imputada por ningún delito.

Finalmente, quienes no están contentos con esta noticia son los familiares del policía asesinado, quienes catalogan como inaceptable que la viuda no deba presentarse ante la justicia por encubrir a su marido, por cuya captura se llegaron a ofrecer 100 mil dólares, es decir, más de 65 millones de pesos chilenos.