Sin duda, el microondas es uno de los electrodomésticos más utilizados en los hogares, pues entrega gran comodidad y rapidez a las familias a la hora de calentar o cocinar alimentos.

Pero no todo lo que consumimos debería pasar por este artefacto de cocina, ya que puede provocar alteraciones en algunas comidas.

Puede haber pérdida de algunos nutrientes o desnaturalización de ciertos nutrientes por este calor o movimiento de partículas“, comentó Gabriella Riveri, nutricionista de Fitbody Chile a 24horas.

En este escenario la profesional manifestó que no es recomendable calentar o cocinar lácteos, huevos, carnes y mariscos, “porque se reduce el aporte nutricional de los alimentos”.

Al respecto, las doctoras Odile Fernández, autora de Alimentación anticáncer, aseguró que: “Algunos alimentos procesados en el microondas pueden perder hasta un 75% de algunos nutrientes como los antioxidantes. Las ondas electromagnéticas hacen vibrar las moléculas de agua de los alimentos motivando una fricción que genera calor desde el interior hacia el exterior, alterando su estructura química”, según consignó el portal El Confidencial.

Otro de los aspectos desfavorables de usar el microondas para cocinar es que las bacterias que pudiesen estar en la comida no se mueren con el calor que les proporciona el artefacto, por lo que implican un gran riesgo para la salud, pues la salmonella y listeria no se eliminan, de acuerdo a estudios realizados en la Universidad de Cambridge en Londres.

Este tipo de cocción también provoca que los alimentos pierdan su sabor, según una investigación realizada en el Departamento de Química del Sabor y Aroma del Centro Nacional de Investigación Tahrir St. Dokki en El Cairo, Egipto. Esto ocurre porque algunos químicos se evaporan provocando que baje la intensidad de sus sabores. El mismo estudio agrega que los alimentos, además, se deshidratan.

Pero con la ajetreada vida que muchos llevan, este electrodoméstico, que ya cumple 70 años desde su creación, se ha vuelto un ‘mal necesario’. En este contexto, te entregamos algunos consejos para utilizarlo de la mejor manera posible.

1.- No usar recipientes de plástico, pues sus químicos pueden ser traspasados a la comida.

2.- Es recomendable utilizar recipientes de vidrio para calentar los alimentos.

3.- Dejar abierta la puerta del ventilador un par de minutos antes de introducir la comida.

4.- Pese a la creencia generalizada de que debes dejar unos segundos la comida dentro del microondas para que repose y evitar el peligro de radiación por exposición a las partículas de radiofrecuencia, los investigadores han demostrado que este trámite no es necesario ya que una vez apagado, no quedan residuos de estas partículas.