Un piloto de Alaska Airlines, que viajaba como pasajero, ha sido acusado de 83 cargos de intento de asesinato.
Esto luego de que supuestamente intentara apagar los motores de un avión en pleno vuelo este domingo.
Joseph Emerson, de 44 años, fue detenido por el Departamento de Policía del Aeropuerto de Portland, en Estados Unidos, donde el avión se vio obligado a aterrizar.
Esto después de que se reportara una amenaza a la seguridad en un vuelo que había despegado de Everett (Washington) y se dirigía a San Francisco (California).
Emerson también enfrenta 83 cargos por poner en peligro inminente a los pasajeros y la tripulación, y un cargo de poner en peligro una aeronave, según los registros de la Oficina del Sheriff del condado de Multnomah, citados por la cadena estadounidense NBC.
En total, este piloto arriesga 622 años de prisión
En un comunicado, Alaska Airlines dijo que “el ocupante del asiento plegable intentó sin éxito interrumpir el funcionamiento de los motores” del avión operado por Horizon Air, una filial de Alaska Airlines.
La aerolínea añadió que la tripulación respondió rápidamente logrando que la potencia del motor no se perdiera y “aseguró la aeronave sin incidentes”.
Emerson viajaba sentado en el asiento plegable de la cabina detrás de los pilotos. Por lo general, los pilotos de aerolíneas fuera de servicio se sientan en ese asiento cuando van de regreso a su base de operación.
La Administración Federal de Aviación envió una alerta y aclaró que el incidente de seguridad no está relacionado con amenazas terroristas derivadas de los conflictos internacionales. El FBI está investigando el incidente.
¿Quién es Joseph Emerson?
Según detalló el portal británico Daily Mail, Emerson habría sufrido un ‘colapso mental’ que lo llevó a cometer este acto.
Sus vecinos lo catalogaron como un ‘devoto hombre de familia’, ‘un padre feliz y juguetón’, ‘amigable sin mayores problemas’.
Por lo mismo, impactó mucho su actuar: “Es una noticia realmente impactante e inquietante (…) Son excelentes vecinos. Es un padre fantástico. Juega con los niños todo el tiempo. Es muy amigable. Es simplemente un gran tipo”, comentó una de sus vecinas.
Los antecedentes señalan que Joseph vivía con su esposa Sarah Stretch y sus dos hijos pequeños en un sector residencial de California, y nunca antes había cometido algún acto de este tipo.
