Al menos 50 migrantes han sido hallados muertos en el interior de un camión en la ciudad estadounidense de San Antonio, en el estado de Texas.

Esto después de asfixiarse debido a la falta de oxígeno y a las altas temperaturas (casi 40 grados), según el último balance de las autoridades locales.

El alcalde de la ciudad, Ron Nirenberg, ha calificado el hallazgo como “terrible” y ha señalado que se trata de una “tragedia humana”.

Un trabajador halló un remolque con las puertas parcialmente abiertas, tras oír el grito de una persona: dentro encontró los cadáveres

En total, otros 16 migrantes que también se encontraban a bordo del vehículo han tenido que ser trasladados a varios hospitales de la zona.

“Parece que habían sido víctimas de una operación de tráfico de personas (…) quizá llevaban allí un par de días. No les habían dado agua ni comida y obviamente estaban tratando de conseguir ayuda”, ha detallado el subjefe de la Policía de San Antonio, Eric Hightower, en declaraciones recogidas por News 4 San Antonio.

Al lugar se han trasladado varios efectivos de la Policía, dotaciones de bomberos y ambulancias, mientras los agentes han puesto en marcha una operación de búsqueda y captura para dar con el paradero del conductor del vehículo, que lo habría abandonado a las afueras de la ciudad, según informaciones de la cadena ABC.

Críticas a Joe Biden

El gobernador de Texas, Greg Abbott, ha culpado al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, de haber provocado la muerte de los migrantes.

“Estas muertes pesan sobre Biden. Son el resultado de sus letales políticas de fronteras abiertas. Muestran las consecuencias mortales de su negativa a hacer cumplir la ley”, ha asegurado Abbott en su cuenta de Twitter.

Biden, sin embargo, ha condenado la “trágica pérdida de vidas” en San Antonio y ha expresado su apoyo a las víctimas y “sus seres queridos”, así como “aquellos que están luchando por sus vidas”.

“Como siembre, estamos agradecidos por el trabajo de los agentes a nivel estatal, federal y local que han llegado los primeros al lugar de los hechos”, ha aseverado, según ha recogido la Casa Blanca en un comunicado.

En este sentido, afirmó que todo apunta a que “la tragedia ha sido provocada por traficantes de personas que no tienen consideración alguna por las vidas que ponen en peligro y explotan para sacar beneficio propio”.

El presidente de México, Manuel Andrés López Obrador, lamentó lo sucedido y dispuso su apoyo al Gobierno estadounidense y las familias afectadas.

“Quiero expresar mi más sentido pésame a familiares de migrantes mexicanos, hondureños y guatemaltecos que murieron asfixiados en un tráiler. Es una tremenda desgracia, esto ocurrió en San Antonio, Texas”, ha aseverado en su rueda de prensa diaria.

Así, ha explicado que el cónsul mexicano en San Antonio, Rubén Minutti Zanatta, se encuentra en la zona “dando apoyo a los afectados”.

“Estamos en contacto con las autoridades locales y a la espera del informe de las autoridades nacionales”, ha dicho el diplomático.

De los 50 fallecidos, 22 tienen nacionalidad mexicana, siete proceden de Guatemala y dos de Honduras. Además, los cuerpos de otras 19 personas aún no han sido identificados.