Un sacerdote católico utilizó un pronombre equivocado en los miles de bautizos que realizó durante más de veinte años de carrera en Estados Unidos, lo que invalida el sacramento y puede conllevar a tener que realizarlo nuevamente.

Se trata del padre Andrés Arango, quien servía en Phoenix, Arizona, y que durante todos estos años pronunciaba: “Nosotros te bautizamos“, en vez de: “Yo te bautizo“, informó la diócesis de la ciudad en un comunicado.

“El problema con ‘nosotros’ es que no es la comunidad que bautiza a una persona, es Cristo, y solo él, quien preside todos los sacramentos, y por eso es Cristo quien bautiza”, escribió Thomas J. Olmsted, obispo de Phoenix.

Miles tendrían que bautizarse nuevamente

El error en las ceremonias del consagrado fue identificado a mediados de 2021. A causa de los problemas que esta equivocación generó, la diócesis de Phoenix creó un portal de preguntas y respuestas para aclarar dudas, en la que incluyó cuestiones como “¿necesito confesarme?”, “¿mi hijo puede recibir la comunión?” o “¿esto afecta a mi matrimonio?”.

El bautismo es el primero de los sacramentos de la vida católica. Su invalidez podría impactar a los rituales siguientes como la confirmación o el matrimonio, que tal vez tengan que ser repetidos también.

Se desconoce cuántos fieles fueron afectados, pero la diócesis cree que podría tratarse de miles, y dispuso un correo electrónico para facilitar el contacto a quienes fueron bautizados por el padre Arango en los últimos 20 años.

El padre renunció por culpa de este error

Sacerdote desde 1995, Arango trabajó en Brasil y en San Diego, antes de llegar a Phoenix en 2005, donde cumplía labores de pastor en una parroquia desde 2017.

La diócesis informó que el padre renunció a esta posición a raíz del error, pero que esto “no lo descalifica de su vocación y ministerio“.

“Lamento profundamente mi error, y cómo esto ha afectado a varias personas en la parroquia y en otros lados”, escribió en una carta, disculpándose con los fieles e informando sobre su salida.

Además, dijo que “con la ayuda del Espíritu Santo” se dedicará a tiempo completo “a ayudar a la sanación de quienes fueron inválidamente bautizados“.

Cabe señalar que las palabras y elementos utilizados en el bautismo deben ser respetados al pie de la letra, siguiendo la doctrina del Vaticano.