En la madrugada del sábado 10 de diciembre de 2011, un violento femicidio impactó a toda Argentina.

Los protagonistas de esta historia son Carla Figueroa y Marcelo Tomaselli, quienes se conocieron cuando ella tenía 14 años, comenzando una relación marcada por la violencia y abusos de parte del hombre.

La joven mujer tuvo una dura historia familiar, luego que su padre mató a su madre cuando ella tenía solo 8 meses de vida.

La soledad fue un elemento que permitió que la adolescente fuera controlada, así lo relató Paola, sobrina de Carla. “Eso usó siempre él para manipular su mente: ‘¿A dónde te vas a ir si estás sola?’, ‘lo único que tienes soy yo’”, dijo, consignó Infobae.

“No me importa nada”

Cuando cumplió 17 años, Figueroa quedó embarazada de su único hijo, lo cual la llevó a buscar dos trabajos para mantener a su bebé pese a la negativa de su pareja, pues consideraba que su labor solo se remitía a lo doméstico.

Luego que el niño cumpliera un año y medio, Carla le dijo a Tomaselli que quería terminar la relación, lo cual fue tomado de mala forma por el hombre, quien esperó que ella saliera de uno de sus empleos para perpetrar un horrendo crimen.

Tras encontrarse con la mujer, el sujeto la llevó a un desagüe en la localidad de General Pico, el cual en Argentina se le dice “la olla”, en donde la apuntó con una arma blanca para cometer su fechoría.

“Me puso el cuchillo cerca de la cara y me dijo ‘sácate la ropa porque yo acá te cago matando y no me importa nada’. Le hice caso, hizo lo que tenía que hacer, fue, prendió un cigarrillo, yo me vestí y me paré. (…) Después vino con el cigarrillo y el cuchillo en la mano, me empujó, me tiró al piso y se me subió encima de la panza. Me decía que yo de ahí no me iba a ir, que él me iba a matar”, recordó Carla (de manera incógnita) en un programa de televisión trasandino, consignó el citado medio.

Gracias a que dos transeúntes estacionaron su camioneta cerca del lugar en donde se realizó la violación, Marcelo no consumó el homicidio.

Posteriormente, y luego de varias pericias, Tomaselli fue detenido, aunque esto no evitó que continuara con su manipulación.

A más de 10 años de brutal femicidio que se pudo evitar pero que la justicia argentina facilitó
Infobae | Marcelo Tomaselli detenido

El polémico ‘avenimiento’

Durante los meses de encierro de Marcelo, su abogado comenzó a tomar contacto con Figueroa, a quien le habló de una figura del Código Penal Argentino llamado “avenimiento”. Este artículo ofrecía al abusador la posibilidad llegar a un acuerdo con la víctima, o sea una manera de “perdonar” al imputado, siempre cuando se cumplan ciertos requisitos.

Luego de varias conversaciones -y también amenazas- la pareja decidió utilizar dicha herramienta legal, la cual fue rechazada por la Cámara del Crimen de Picó.

Sin embargo, 14 días después del fallo, el 28 de octubre de 2011, Carla y Marcelo se casaron por el civil, lo cual obligó al Tribunal de Impugnación Penal a otorgarles el avenimiento con una votación dividida de dos a uno, informó Clarín.

Está bien, lo hago por el nene”, se le escuchó decir a la mujer, luego de tan sorpresiva decisión.

“El abogado de él y la familia usaron la vida que ella había tenido para manipularla. Le dijeron que esa era la única forma de que su hijo no se criara como ella, solo. Lo que tenían que demostrar, para que la Justicia lo aceptara, era que se habían reconciliado, ¿entonces qué hicieron? Se casaron”, recordó Paola.

A más de 10 años de brutal femicidio que se pudo evitar pero que la justicia argentina facilitó
Infobae | Marcelo Tomaselli durante su juicio

Un evitable femicidio

El 2 de diciembre del mismo año, Tomaselli salió en libertad tras ocho meses en prisión, para luego una semana después matar de 15 puñaladas, y frente a su hijo de dos años, a Carla.

“¿Sabes cómo nos enteramos? Prendimos la televisión y la estaban sacando de la casa de él en una bolsa”, afirmó Paola.

Cabe señalar que luego de tan horroroso crimen, y gracias a la presión social, el avenimiento fue derogado en marzo de 2012 por la Justicia argentina.

“En el grupo siempre les decimos a las otras mujeres: ‘Tiene que haber consentimiento’, ‘tiene que ser algo que quieras’, puede ser tu novio, tu marido, pero no es tu dueño, puedes decir que no sin explicar los motivos. Si no querías y lo hizo igual, es violación. Si se sacó el preservativo sin decirte, también. Creo que cuando se trata de una pareja o alguien conocido, a nosotras nos cuesta mucho la palabra violación”, sentenció la sobrina de la víctima.

Por su parte, Marcelo Tomaselli fue condenado a cadena perpetua, en tanto el hijo que tuvo con Carla, fue adoptado por la hermana de la víctima y su esposo, puntualizó Infobae.

Eres lo más valioso que dejó tu mamá, y estamos agradecidos de tenerte y poder cuidarte”, expresó Paola en sus redes sociales.

A más de 10 años de brutal femicidio que se pudo evitar pero que la justicia argentina facilitó
Infobae | Carla Figueroa con su hijo