Los chilenos consumimos una gran cantidad de alimentos durante la celebración de Fiestas Patrias, y es que hay preparaciones tan deliciosas que es difícil no probarlas.

También están los tradicionales asados, los que también conllevan un riesgo si el trozo de carne que ingerimos es muy grande o no lo masticamos lo suficiente, pues podemos atragantarnos.

El pediatra de la Clínica Alemana Héctor Aranibar, instructor de BLS, y Jefe de la Unidad de Capacitación en RCP (reanimación cardiopulmonar), explica que “una asfixia se reconoce cuando un elemento bloquea por completo la vía aérea y la persona se lleva las manos al cuello”.

¿Qué hacer si veo que alguien está atragantándose?

En el caso de que una persona presente todos los signos de atoramiento se debe recurrir a la Maniobra de Heimlich, la que consiste en los siguientes pasos:

1.- Ubícate por detrás de la persona, con el pulgar extendido busca el ombligo.

2.- Cierra la mano, coloca la otra encima, presiona hacia adentro y arriba, fuerte y rápido.

3.- Sigue presionando hasta que expulse el cuerpo extraño.

4.- Si pierde el conocimiento, realiza reanimación cardiopulmonar (RCP).

¿Y en el caso de los niños?

Los especialistas aseguran que es clave tener seguridad para ayudar al menor de edad y seguir los pasos anteriores, pero antes, debes hacer lo siguiente:

1.- Posicionar al pequeño mirando hacia el suelo y sentado en tus piernas

2.- Da cinco golpes con la palma de la mano en la parte alta de la espalda, entre los omóplatos

3.- Luego practicar la maniobra de Heimlich para niños, que consiste en colocar una pierna entre las piernas del menor de edad y poner el puño con el lado del pulgar contra el vientre del menor, justo arriba del ombligo pero muy por debajo del esternón y aplicar fuerza, sin levantarlo del suelo.

Los especialistas recomiendan que para que los niños no se atraganten, se debe cortar la carne en pequeños trozos, además de no hablar ni reírse mientras se ingieren alimentos.