¿Qué harías si un desconocido te hiciera una transferencia bancaria por 230 mil pesos? Esto fue precisamente lo que se preguntó Sebastián Antonelli, un argentino que recibió dicho monto por error.

¿Cómo se dio cuenta? A través de un mensaje que recibió en su cuenta de Twitter: “Hola, Sebastián, necesito comunicarme con vos. Pasame un teléfono. Hice una transacción, copié tu CBU (Clave Bancaria Uniforme) sin querer y recibiste fondos ($30.000) que te enviaron por error. Fijate si me lo podés mandar a mi CBU”, decía el texto.

Ante este escenario, el trasandino de 27 años no dudó en devolver el dinero, aunque, en una primera instancia, pensó que podía tratarse de una estafa.

Muchos me comentaban que hay un cuento del tío que te sacan un préstamo a tu nombre y te mandan a tu cuenta, vos los transferís y te quedás con la deuda”, indicó al diario La Nación.

Por lo mismo es que tomó sus precauciones previas. “Me pidió el teléfono, pero yo le pedí el de él para chequear. Lo llamé, era una persona de Rafaela, Santa Fe, con familia, tres hijos. Hizo una operación con criptomonedas, y le había pasado a la otra persona mi CBU en lugar del suyo. Me mostró todas las capturas, y llamé también al banco”, declaró.

Cuando vio que estaba todo en orden, devolvió el dinero. “Nunca dudé en devolverlo. Me llegó de arriba algo por primera vez en mi vida, y al siguiente segundo dije: ‘Esto puede ser algo importante para alguien’”, reconoció.

Asimismo, señaló que la otra persona estaba “súper agradecida” y que le dijo “después te alcanzo algo”, aunque Sebastián admitió que “uno no lo hace por eso”. De todas formas, el analista de sistemas decidió compartir la anécdota en redes sociales.

“Un desconocido me transfirió 30 lucas por error. Se las devolví. Necesito que me digan que no soy un pelotudo”, redactó en Twitter, recibiendo múltiples comentarios destacando su honrada actitud, viralizándose al otro lado de la cordillera.

“No sos ningún pelotudo. Todo es según como te criaron”, “Sos un buen tipo” y “Sos un sobreviviente de la Argentina honesta, trabajadora y con los valores que nos inculcaron nuestros viejos y abuelos”, fueron parte de los mensajes que recibió Antonelli, quien agradeció dichas palabras y entregó una reflexión final.

“Gracias a todos por los mensajes. Al parecer la historia es digna de unos minutos de radio. Qué lindo sería que fuese algo normal e intrascendente. Estaríamos hablando entonces de un mundo un poco mejor“, sentenció.