Una insólita historia surgió en el zoológico británico Lincolnshire Wildlife Park, que decidió aislar a cinco loros grises africanos por insultar a los visitantes.
Billy, Elsie, Eric, Jade y Tyson, llegaron el pasado 15 de agosto al recinto y fueron ubicados juntos en una jaula durante varias semanas que que se adaptaran al nuevo entorno. Sin embargo, no contaban con la astucia de los plumíferos. Es que cada vez que alguien pasaba por afuera de la jaula, se ganaba una palabrota.
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Según explicó el responsable del parque, Steve Nichols, no es raro encontrarse con un loro malhablado, pero en esta ocasión les tocó la mala suerte de que fueran los cinco a la vez.
“De vez en cuando das con uno que insulta y siempre resulta gracioso (…) Y cuanto más insultan, más te ríes, lo que los impulsa a seguir insultado“, explicó a CNN. Por esa razón, a pesar de que no recibieron reclamos por parte de los asistentes al zoológico, decidieron adelantarse y separarlos en grupos diferentes.
Es que así, según relató el encargado del parque, no podrán “enseñar palabrotas al resto” de los loros, que son en total 250. Y como el recinto es frecuentemente visitado por niños, decidieron tomar esta medida preventiva.
De acuerdo a Nichols, los loros sonaban como “un club de hombres mayores que simplemente se insultan y se ríen“. Pero, ¿qué le decían? “Cada vez que pasaba me llamaban ‘gordo tonto‘ (…) ‘Vete a la mierda‘ era el insulto más común y más fácil de aprender para ellos”, explicó.
Sin embargo, según indicó el encargado a la agencia PA, el comportamiento de los loros africanos terminó siendo una divertida anécdota: “Nos ha sacado una sonrisa en un año realmente difícil“.
