Médicos franceses informaron sobre el primer caso confirmado de contagio intrauterino por COVID-19, en un estudio publicado este martes en la revista Nature Communications.

Se trataría de un bebé, nacido en marzo, que sufría de síntomas neurológicos vinculados al virus. Según indicó el autor del estudio, el Dr. Daniele De Luca, la enfermedad la contrajo a través de la placenta en las últimas semanas de embarazo.

Precedentes estudios sugerían la posibilidad de la transmisión prenatal de madre a hijo, pero esta nueva investigación proporciona pruebas.

“Hay que analizar la sangre materna, el líquido amniótico, la sangre del recién nacido, la placenta, etc”, dijo De Luca.

Los médicos realizaron este estudio con una madre joven, hospitalizada a comienzos de marzo. El parto debió realizarse mediante cesárea y fue posible tomar todas las muestras de los potenciales reservorios del virus SARS-CoV-2, cuya carga más elevada se encontró en la placenta.

Desde ésta pasó a través del cordón umbilical al bebé, que lo desarrolló“, señaló De Luca.

Los síntomas

Veinticuatro horas después del nacimiento, el bebé presentó síntomas severos, como rigidez de las extremidades y lesiones en el sistema nervioso cerebral y que fueron desapareciendo poco a poco.

La mala noticia es que puede producirse. La buena es que es raro“, destacó De Luca.

De los miles de casos de niños nacidos de madres que padecen COVID-19, menos del 2% han dado positivo por al virus SARS-CoV-2.

En tanto, un porcentaje mucho menor ha desarrollado síntomas graves, señaló Marian Knight, profesora de salud maternal e infantil de la universidad de Oxford, que no participó en el estudio.

“El principal mensaje para las mujeres embarazadas sigue siendo que eviten la infección mediante el lavado de manos y el distanciamiento social”, insistió esta experta.