“Cuando nací, mi nariz era solo un bulto de piel con fosas nasales”. Con estas palabras, el joven modelo estadounidense Justin Stewart, recuerda la malformación que provocó que sufriera bullying durante su infancia.
Stewart nació con una displasia frontonasal hendida, una extraña condición causada por genes mutados transmitidos por los padres.
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Sin duda la peor parte, fue cuando tuvo que enfrentar crueles comentarios de sus compañeros de curso, quienes lo llamaban “Voldemort”.
“Me costó muchísimo y comencé a creer que lo que los niños me decían era verdad. Me sentía muy mal conmigo mismo”, admitió en entrevista con el diario electrónico Metro.
Al llegar a la adolescencia, Justin inició una campaña en redes sociales para crear conciencia sobre las personas que padecen displasia frontonasal. Fue en ese momento cuando la agencia de modelos “We Speak Model Management” lo invitó a participar en su sede en Nueva York.
Su experiencia en el modelaje
“Para ser sincero, me sentí muy incómodo frente a la cámara y simplemente no fue nada natural”, reconoció Justin sobre su primera experiencia como modelo.
Asimismo, fue contactado desde reconocidas marcas como Tommy Hilfiger y Wrangler para participar en sus campañas.
Al momento de integrarse a la agencia de modelos, su madre le dijo que fue su nariz lo que lo hizo especial y lo ayudó a destacar entre los demás.
“No tengo metas establecidas y solo voy a aprovechar cada oportunidad que se me presente“, admitió el joven modelo que en septiembre entrará a estudiar comunicación.
“Esto solo demuestra que las personas no pueden dictar tu futuro, las palabras duelen, pero todo es posible si lo deseas lo suficiente. Quiero ser lo mejor que pueda ser y voy a dar el 110%”, reflexionó finalmente.
