Un estudio realizado por profesionales de la Universidad de Oxford (Estados Unidos) y de la Universidad de Northumbria (Reino Unido), reveló que el largo de uno de los dedos de la mano puede dar indicios de lo propenso a la infidelidad de algunas personas.
La muestra de estudio incluyo la participación de mil 314 personas que ‘aportaron’ con su mano para llegar al particular resultado de la investigación.
En específico, el profesor John Manning de la Universidad de Northumbria, y el profesor Robin Dunbar del Departamento de Psicología Experimental de la Universidad de Oxford, postularon que existe una relación entre el largo de dos dedos que guarda relación con el grado de fidelidad de la persona.
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De esta forma, afirmaron que quienes tengan el dedo anular más largo que el índice, son más propensos a engañar a su pareja y a tener amoríos de corto plazo, mientras que si la altura entre ambos es similar o el índice es más corto, la persona tiende a la fidelidad y a la búsqueda de relaciones más largas y estables. Ojo, que esto aplica para hombres y mujeres.
La conclusión de ambos profesionales según recoge el prestigioso diario argentino Clarín, fue que mientras más largo el pulgar, la persona estuvo más expuesta a la testosterona en su etapa uterina, lo que sugiere y se relaciona a una mayor promiscuidad sexual cuando adulta.
“El comportamiento humano está influenciado por muchos factores, como el medio ambiente y la experiencia de la vida, y lo que ocurre en el útero sólo podría tener un efecto modesto sobre algo tan complejo como las relaciones sexuales”, argumentó el profesor Robin Dunbar.
