Una mujer islandesa no estaba contenta con su peso y se avergonzaba constantemente de las selfies que ella misma se tomaba y publicaba en Facebook, hasta que convirtió esta vergüenza en un desafiante plan que la llevó a perder cerca de 50 kilos.
Eva Rut Gunnlaugsdottir de 35 años aseguró al medio Central European News, de acuerdo a lo que consigna el estadounidense NY Post, que se sentía muy mal cuando se miraba al espejo y en las fotografías, por lo que decidió iniciar el camino hacia una transformación que la hiciera sentir mejor.
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Eva, que se declara adicta a los chocolates, pesaba hasta el año pasado cerca de 121 kilos.
“Para mí la comida era una droga“, señala, agregando que “Nunca comía un trozo de chocolate, siempre era más y más“.
La madre también dijo que siempre tuvo problemas para controlar su dieta alimentaria y que ha estado con sobrepeso desde que tenía 18 años. “Después de tener mis hijos, casi siete años atrás, perdí completamente el control y subí descaradamente de peso“, añadió.
Cuando ella decidió comenzar este cambio, posteó varias fotografías en su cuenta de Facebook, e inmediatamente asegura que sintió un efecto en ella que la motivó a seguir “de cabeza” este plan.
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“Los primeros 2 o 3 días fueron difíciles, pero desde entonces he estado estable, y flotando en una nube rosa“, señala al medio, comentando que se ha sentido más activa y que hasta otros dolores que tenía han desaparecido.
Fue así como para fines de ese mismo año ya había perdido cerca de 50 kilos, y pese a que asegura que ya se siente fantástica, quiere continuar con una vida sana y así mantener su nuevo peso.
“Aún siento tristeza por cómo lucía en las primeras selfies del año pasado, pero siempre consigo sentirme mejor cuando veo las de final de año“, señaló emocionada.
