Desde la más tierna niñez que las mujeres aprenden cómo cuidar su área genital, pero ¿qué ocurre cuando no existe la suficiente información y educación? Es así como nacen aberrantes prácticas como el “sexo seco”, problema sexual que se ha instalado en diversas zonas de África e Indonesia.

Como reveló la revista estadounidense Vice en un artículo, se trata del “problema de salud sexual africano del que nadie habla”. ¿Pero qué es el “sexo seco”? Este consiste en reducir la humedad natural de la vagina, para que esté más “contraída” durante la relación.

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Su objetivo apunta a que el hombre obtenga más placer. ¿Pero qué ocurre con la mujer? Esta expone su salud al introducir en su vagina elementos peligrosos como tiza, arena, polvo de roca, hierbas, papel o esponjas. Incluso, las féminas africanas recurren a tóxicos detergentes o antisépticos.

scion_cho (cc) | Flickr
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En Emol, consultaron al especialista de la Red de Salud UC CHRISTUS, Enrique Oyarzún, quien afirmó que esta práctica “es una locura”. Este fue enfático al señalar que la lubricación que la vagina produce durante el coito es esencial para el placer del hombre y la mujer y que al quitar esto, la mujer sólo siente dolor.

“Si bien es cierto que, en esta diversidad de la especie humana, pudiera haber un grupo de individuos para los que el tener más dolor durante la relación sexual le pudiera causar placer, hay que aceptar que eso constituye algo excepcional, más bien una rareza diría yo”, dijo Oyarzún.

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Lo peor de todo, son las lesiones que provoca el uso de elementos peligrosos en el área genital: “Esas heridas pueden tener consecuencias a mediano y largo plazo para la mujer (…) Pueden suponer infecciones, entrada de gérmenes a través de las heridas y mayor compromiso en infecciones de transmisión sexual (…) Yo creo que es un problema mayor, sin ninguna ventaja”, asegura.

En este artículo, la sexóloga Marlene Wasserman, afirmó que el silencio que hay en torno al “sexo seco” no sólo ocurre por falta de educación, sino porque no existe igualdad al placer en este país:

“Es sin duda un problema de clase… entre las mujeres que están menos informadas y menos educadas, hay una increíble ignorancia en torno a la idea de que la vagina se adapta al pene. La gente cree que si estás con un hombre con un pene grande significa que tu vagina quedará así de grande. Y si terminas con él y te vas con un hombre con un pene más pequeño, tu vagina todavía será grande y él sabrá que estuviste con otros hombres con penes grandes (…) No querrá estar contigo. La reputación de una mujer depende del tamaño de su vagina”, declaró.