Jean-Philippe Cretton utilizó su cuenta de Instagram para hacer una profunda reflexión sobre el paso de los años y la vejez.

El animador de Podemos hablar compartió una serie de fotografías donde aparece en medio de la naturaleza.

Tengo 38 y siendo aún joven, siento los pasos de la edad. Los escucho en mi silencio y los abrazo como un niño. Las arrugas en mi cara trazan el mapa de mi propia existencia”, escribió.

Agregó que “me doy cuenta de que envejezco y con ello, asumo y valoro lo que he sido y soy. Soy el mismo niño solitario que alguna vez fui, jugando en el bosque que sugería mundos insondables”.

“Ahora, camino tranquilo por otros bosques deslumbrado de cómo insectos y aves, se configuran entre añosos árboles testigos de la historia. Eso me hace feliz”, afirmó.

“Con los años me cuesta más la ‘Sole’. Es cierto, me doy cuenta, pero ¿qué habría sido de mí sin ella? Me doy cuenta de que la ciudad y sus presiones, me hacen mal. Me cuesta cada vez más con los años. Yo no soy de ahí, pero lo asumo con tranquilidad, paciencia y agradecimiento”, manifestó.

Además, expuso que “me gusta vivir, pese a mis sombras. No, corrijo. Me gusta vivir gracias a mis sombras, que hacen hoy de mí este hombre más viejo, capaz de disfrutar lo simple. Incluso, cuando se entorpece”.

“Me gusta vivir, pero mientras más viejo, me gusta vivir a mi ritmo. Como mis canciones, lentas y oníricas. Me gusta en lo que me he convertido, porque siento que he sido un hombre bueno. Me está gustando hacerme viejo“, finalizó Jean-Philippe Cretton.