Roberto Cox se convirtió en tendencia en redes sociales durante el fin de semana, debido a múltiples acusaciones por parte de vecinos en la comuna de Ñuñoa.

Los usuarios de la red social aseguraron que el conductor de CHV Noticias realizaba fiestas hasta altas horas de la madrugada en su domicilio, generando ruidos molestos, los que se extendían hasta las 3 o 4 de la mañana.

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“Anoche fue con karaoke a todo pulmón, tengo dos niñas que les costó mucho dormir ¿Podrá tener consciencia de vivir en comunidad?“, cuestionó uno de los tuiteros, mostrando un registro.

Tras esto, Cox indicó que efectivamente realizó una celebración en su departamento, pero que no fue una fiesta “desenfrenada”, como se comentó en las plataformas sociales.

“Es mentira que hacemos fiestas todos los días. Durante la semana me levanto a las 5 de la mañana (…) Difícilmente podría carretear todos los días”, explicó a Agricultura, añadiendo que “solo nos juntamos entre amigos, como lo puede hacer cualquier persona”.

Extenso “desahogo”

Ahora, el periodista ocupó su cuenta dec Twitter en donde se desahogó profundamente por esta situación. “La ‘funa’ y la aberrante complicidad de los medios web”, tituló a su hilo en Twitter.

“En los últimos días he recibido miles de insultos y agresiones tras un asado en mi casa en el que nos juntamos 12 personas a despedir a un amigo”, comenzó afirmando Cox.

“Varios portales web titularon el presunto escándalo como el ‘indeseable del barrio’, hablaron de carretes desenfrenados todos los días (…) armaron cada uno de sus artículos basándose únicamente en comentarios de Twitter (…) reposteando un video en el que poco y nada se aprecia y, peor aún, viralizando la dirección donde vivo”, agregó.

Tras esto, el comunicador acusó que ninguno de dichos medios que replicó la información se contactó con él: “Mi teléfono nunca sonó”, dijo, agregando: “¿Qué clase de periodismo de escritorio es ese? Quedarse sentado a que escriba algo en Twitter”.

Asimismo, contó que “no tengo ganas de salir a explicar lo que hago en mi casa. Tengo una polola y un lindo grupo de amigos con los que nos divertimos sanamente. ¿Es pecado?“.

De todas formas, el conductor del noticiario de CHV señaló que “si a algún vecino le molestó el ruido, pido mis más sinceras disculpas y procuraré que no vuelva a ocurrir”.

Pero también aprovechó de enviar un directo recado: “Espero que me denuncien a Carabineros o las autoridades pertinentes sin esa necesidad tan cobarde de enviar correos a mi lugar de trabajo para sapearme o incluso dar a conocer donde vivo y de paso buscar que pierda mi empleo”, cerró.