Hace poco menos de dos semanas el actor Francisco Pérez-Bannen salió de Chile rumbo a Israel.

El intérprete del subcomisario Gonzalo Leiva en la exitosa teleserie nocturna de Mega, Demente, se tomó unas merecidas vacaciones tras las intensas grabaciones.

Pérez-Bannen partió con R3viajar, Agencia creadora de experiencias de viajes, con el objetivo de experimentar y mostrar la nueva forma de viajar.

La primera imagen que el actor compartió desde este destino fue en “Jafa, hermosa ciudad portuaria inmediatamente al sur de Tel Aviv”.

Posteriormente se trasladó a Monte Eremos, “donde Jesús dio el Sermón de la Montaña y entregó las bienaventuranzas… un lugar de mucho silencio, belleza y recogimiento”.

Aprovechando este viaje, el actor no perdió la oportunidad de bañarse en el Mar Muerto, tras lo cual compartió su experiencia.

“Es muy impresionante la experiencia de bañarse en el Mar Muerto. Desde niño había escuchado esta historia de flotar sin ningún esfuerzo… Estar ahí y vivirlo superó todas mis expectativas, es un fenómeno geográfico impresionante”, comentó el actor del área dramática de Mega.

Sumado a lo anterior, recordó que “el Mar Muerto está a 447 mts bajo el nivel del mar, por lo tanto tiene una condición de presión única en el mundo, su salinidad te hace flotar sin esfuerzo y su cantidad de minerales tiene muchas propiedades para la salud. En la época de Herodes este extraía sal y la vendía a precio de oro, también pagaba servicios con sal, de ahí viene la palabra salario”.

“Desde acá les mando toda la energía luminosa que guardan estos lugares sagrados”, añadió, junto con compartir varias imágenes de su experiencia.

Cabe destacar que Francisco Pérez-Bannen también conoció el “Muro de los lamentos”, sobre lo cual compartió que “hombres y mujeres entran por lugares separados y los hombres debemos ponernos una kipá que te regalan. La kipá se usa para tener consciencia de que como ser humano llegas hasta ahí, donde termina tu cabeza y que de ahí para arriba está Dios”.

“Este es el lugar más sagrado para los judíos y si bien predomina una atmósfera de letanía, también leen salmos, hacen alabanzas rogativas y celebran Bar Mitzba con mucha alegría, música, bailes y cantos”, contó.

A su vez, detalló que “en lo personal al estar ahí conecté con un profundo sentimiento de gratitud, de humildad, de celebrar y honrar la vida como un presente divino que se nos ha dado a tod@s por igual, sin importar raza, color, credo, nación, género, status o condición de cualquier índole. ¡Gracias, gracias, gracias!”.

Finalmente, Pérez-Bannen aseguró que “estar en la tumba vacía de Jesús ha sido para mí una de las experiencias más profundas de este viaje. Es el único día en que sincrónicamente nos ha tocado lluvia invitándonos al recogimiento, a la reflexión sobre el vía crucis, sobre la muerte y la resurrección”.