Un desgarrador episodio de bullying es el que relató Chico Olmedo en Generación 98, el que veremos este jueves por las pantallas de Mega.
En específico, todo ocurrirá con la visita del empresario a Loreto, una vez que ella concretara su participación como inversionista del proyecto Punta Virgen, según pudo ver Página 7 en Mega Go.
Ante ello, Hernán llegará a su casa con el propósito de conversar sobre esta situación, pero no sin antes subsanar los problemas que arrastran desde que eran compañeros de colegio.
Lo anterior, luego que afirmara que tenían que conversar “después de lo que ustedes me hicieron en el camarín, ¿te acuerdas?”.
“Tenemos que limpiar nuestra relación, y vamos a hablar. Yo sé que te acuerdas, porque yo sí, me acuerdo de cada detalle. ¿Quieres que te refresque la memoria? Porque vamos a hablar de esto y lo que me hicieron hace 25 años cuando me encerraron en ese camarín”, dijo, refiriéndose a un episodio de bullying ocurrido en 1995.
El doloroso relato de Chico Olmedo en Generación 98
De acuerdo a Hernán, todo comenzó cuando Tomás lo invitó al final de una misa a un encuentro de fútbol, al que accedió inmediatamente, pues no recibía ese tipo de ofrecimientos de sus compañeros, por lo que estaba “súper ilusionado”.
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Sin embargo, todo significaba una trampa, ya que cuando salió del camarín de hombres donde se estaba cambiando ropa, Tomás —alias ‘El Moco’— no lo dejó salir, y lo empezó a golpear, para luego arrastrarlo hasta el camarín de mujeres.
Allí, lo encerró delante de todas sus compañeras en un cubículo sin luz ni baño, donde la principal testigo era Loreto, quien no hizo nada para ayudarlo.
“Al principio pensé que estaban jugando, que era una broma pésima, y que me iban a soltar cuando se terminara la pichanga, pero no pasó, no llegaron. Me costaba mucho trabajo imaginar que, Tomás y tú, iban a ser capaces de dejarme ahí”, sostuvo.
Y agregó: “Ese cubículo no tenía ventanas, no tenía baño, y no sabía cuánto rato había pasado. No sabía si era de noche, y ahí pasó un día, pasaron dos días, hasta que el sábado apareciste tú, y me abriste la puerta, ¿te acuerdas o no?”.
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Acto seguido, Olmedo precisó que le rogó a Loreto que lo sacara de ahí, pero ella se negó. “Te pasé una negrita y un yogur, y te dije que aguantaras un día más, porque ‘El Moco’ te iba a sacar al otro día”, comentó afectada la dueña del local de sushi.
En ese sentido, el empresario recordó entre lágrimas que en aquel momento solo pensaba que ella le lanzó los productos “como se le tira la comida a un perro”.
¿Perdón después de 25 años?
Posteriormente, ambos personajes continuaron conversando sobre la violenta situación que vivió Olmedo siendo un adolescente en Generación 98.
“¿Me he preguntado por qué no me dejaste salir? Por qué Loreto, si tú me viste ahí, nos miramos a los ojos, viste que estaba muerto de miedo, estaba preocupado por mi familia, estaba cagado entero, tenía frío… ¿Por qué?”, expuso.
Acto seguido, Loreto se excusó afirmando que “no podía, no hay un día en que no piense en esa historia, y te juro que no tenía idea de lo heavy que era para ti hasta que te vi tiritando, cagado, me miraste con esos ojitos llenos de pena, pero no podía volver. Era la reina, era la popular, tenía que ser querida, aceptada por todo el colegio”.
Captura | Generación 98
Finalmente, Olmedo manifestó que la perdonaba por lo sucedido, sellando el momento con un ‘sincero’ abrazo.
“Con el tiempo me di cuenta de que no eras así, mala, sino que era tu personalidad. Siempre hay uno así en los grupos de amigos. Alguien que es influenciable, un cómplice sonriente y silencioso de cualquier atrocidad, alguien que es capaz de hacer cualquier cosa con tal de caerle bien a la gente. Esa eres tú y el Gonzalo”, cerró.
