Con la Danza de los Dragones a punto de dar comienzo, La Casa del Dragón encara ya el final de su primera temporada. Un desenlace en el que todos los personajes buscan armar sus alianzas y apoyos ante la inminente guerra por la corona.

Una de las que más incansablemente trabaja en ello es Alicent Hightower, la reina consorte de Viserys I. Y en sus constantes y discretos encuentros dentro de palacio para apuntalar su posición y la de su hijo Aegon, Alicent ha vivido uno de los momentos más desagradables en la historia. Y no solo de la serie, sino de toda la saga Juego de tronos.

Durante el noveno capítulo, la reina vuelve a encontrarse con Larys Strong, el ladino noble con el que comenzó a colaborar en el quinto capítulo, al que durante años los Hightower han encomendado el trabajo sucio, incluyendo asesinatos de sus propios familiares.

En esta ocasión, Alicent solicita información sobre lo ocurrido con Aegon, su hijo, y quien ella cree que Viserys eligió como legítimo heredero.

Pero, en contra de lo que parecía sugerirse hasta el momento, la ayuda de Strong a la regente ya no es desinteresada, algo que nunca cabría esperar, sino que cuenta con un depravado y pervertido componente.

La depravada escena entre Alicent y Larys en La Casa del Dragon

En los episodios anteriores todo hacía suponer que Sir Larys congeniaba con la reina sencillamente por puro interés sociopolítico, ganándose una posición favorable y protegida en la Fortaleza Roja. Pero en el último capítulo se ha desvelado que no es así.

El hombre cojo le revela a Alicent lo que ella quiere saber, pero lo hace a cambio de complacer unos extraños y fetichistas deseos sexuales: verle los pies.

A medida que Alicent se descalza y se quita los calcetines, Strong cuenta más y más información, prometiendo en última instancia arreglar los asuntos de la reina justo antes de empezar a masturbarse delante de ella, que aparta la mirada, pero se mantiene inmóvil mostrando sus extremidades inferiores a su vicioso aliado.

La inquietante escena no pasó desapercibida en redes sociales, donde cientos de fans manifestaron sorpresa y desagrado por lo ocurrido.