Tras interpretar a Dominga Costa en la teleserie nocturna Pacto de Sangre, la actriz Antonia Aldea se fue de vacaciones a Barcelona, donde decidió quedarse a vivir.
Si bien no estaba en sus planes radicarse en Europa, en 2019 la joven retomó el viejo anhelo de seguir perfeccionándose en el ámbito del cine y la actuación.
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Mediante su cuenta de Instagram y blog personal, Aldea ha compartido con sus seguidores las experiencias que ha vivido durante estos tres años en Europa.
“La vida me llevó a Barcelona en donde inicié el proceso de independizarme y hacerme adulta“, expresó mediante su sitio web.
En ese contexto, comentó que mientras hacía un curso de Crítica Cinematográfica, trabajaba ilegalmente en Barcelona, e intentaba conseguir sus papeles para poder quedarse.
De igual forma, señaló a través de su cuenta de Instagram, que el pasado miércoles fue su último día como heladera.
“Uno de esos trabajos que jamás imaginé, pero que me dieron un sinfín de buenos momentos y de anécdotas que me quedo para toda la vida”, expresó mediante redes sociales.
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Antonia Aldea habló del proceso que vivió durante la pandemia
Asimismo, a través de su blog, se refirió al complejo proceso que vivió durante la pandemia. “Llegó un momento en donde tuve que enfocarme en trabajar. El agobio me ganó y dejé todo”, expresó, según recoge el sitio AR13.
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“Desaparecí de redes sociales, y me dediqué a estabilizarme y a intentar resolver qué es lo que quería hacer. Ya no sabía qué era lo que me motivaba“, añadió.
Aldea también admitió que le pasó la cuenta tanta exposición y competencia en redes sociales. “Ver a otras actrices que estaban actuando, que tenían una carrera. Ver a otras influencers que crecían más que yo. Ver los malos comentarios. Subir fotos e historias todos los días. Exponer mi vida personal al escrutinio de todos“, fueron parte de sus reflexiones.
