Ana María Muñoz, más conocida como “Zapallito italiano”, recordó su niñez en el Hogar de San Patricio de Limache, durante su cena en la reciente edición de La Divina Comida.

“Cuando era niña tenía ansias de que me quisieran, que me amaran. Tener oportunidades en la vida”, reflexionó sobre aquella etapa.

En este contexto, se refirió a los prejuicios que existen en la sociedad. “Las niñas de hogar siempre han sido como mal miradas, que no vamos a llegar más allá de embarazarnos, encontrar a un hombre ‘que las mantenga’, y resulta que no es así”, planteó.

Bajo su experiencia, reconoció que “solo necesitamos gente que nos aporte en nuestra vida”.

Ana María Muñoz en La Divina Comida
Captura CHV

“Hoy los hogares necesitan gente con voluntad, con ese querer de estar cuidando, educando y enseñando a un menor de edad. En mis tiempos era la ‘tirada de oreja’, ‘el reglazo’… la verdad es que así no aprendemos”, apuntó Muñoz.

“Yo le pedí perdón a cada uno de mis hijos por mis errores, porque yo fui criada a golpes y a gritos, a malos tratos. Pero uno decide cambiar esos hechos. Si bien yo soy muy disciplinada, también les doy mucho amor“, concluyó.