Este sábado a las 17.20 horas se estrena en Mega la tercera temporada de Disfruta la ruta, programa conducido por Mariana Derderián, quien recorrerá los paisajes más lindos de Chile, sumergiéndose en tradiciones, culturas, lugares y sabores de nuestro país.

La buena recepción del público permitió que este nuevo ciclo creciera, con un total de 16 capítulos (en comparacón a las temporadas 1 y 2, que tuvieron 12 capítulos cada una).

Mientras recorría la carretera en medio de las grabaciones, la actriz conversó con Página 7, asegurando que “es una temporada que viene mucho más aperrada, diría yo. Seguimos conectándonos con la gente, con sus oficios y con estos lugares que no son destinos turísticos, pero sí lugares altamente recomendables”.

Además, indicó que la intención es que la gente no se pierda la oportunidad de visitar estas zonas en sus vacaciones, sean de la costa o de la cordillera. “También es importante que las conozcan porque hay oficios que de alguna manera están acabándose, y hay una nostalgia que eso genera”, indicó.

“Hay una sensación de rescate, de mostrarlo y ponerlo sobre la mesa… Es un reconocimiento y un homenaje a toda la gente que se ha ganado la vida en estos lugares tan escondidos, con oficios pasados de generación en generación“, reflexionó Mariana.

Según su relato, igualmente hay una cuota de tristeza al ver que algunos de esos oficios van a desaparecer. “Otros no, y les puede quedar para rato, pero esa generación actual a veces prefiere hacer otra cosa y van quedando los últimos. Esa ha sido siempre la idea del programa: el rescate de los oficios y mostrar estos lugares y las personas que los habitan”, indicó.

Además, destacó que el resultado de esta temporada “está hecho con mucho cariño. Es un programa muy luminoso, alegre, y van a reírse y pasarlo bien, además de aprender, porque uno aprende cómo son estos oficios, cómo se hacen, y es muy entretenido”.

Para la conductora de Disfruta la ruta, este programa “es una fuente inagotable de lugares, personas y gente para visitar que te reciben con los brazos abiertos. Hay cariño y buena onda. Es un programa precioso de hacer y de ver”.

“Quedan pocos programas transversales de esos que puedes sintonizar con los padres, los abuelos y los niños. Les llega a todos de distinta manera”, comentó.

Oficio en extinción

Si bien ha grabado la mitad de esta nueva temporada, Mariana Derderián reconoció que entre los capítulos ya listos puede destacar aquel en que aprendió a hacer adobe.

“Las construcciones de adobe me parecen maravillosas, pero están en extinción. Me di cuenta de que es un oficio al que le queda poquito. Lo miro con nostalgia desde ya”, explicó, detallando que no tiene solo que ver con que Chile sea un país sísmico.

“Hay materiales más baratos en relación al tremendo trabajo que hay que hacer para constuir ladrillos de adobe. Es mucha pega y mucho tiempo el que se le dedica. Tiempo que puedes usar en otra cosa para hacer dinero, y el ladrillo es más barato. Tiene que ver con una cosa económica, y que las nuevas generaciones no están dispuestas”, lamentó.

Aventuras nuevas

En medio de la entrevista, Mariana reveló que, solo el día anterior, le tocó grabar una carrera de caballos a la chilena, la que se corre a pelo.

Primera vez en mi vida que me subo a un caballo a pelo. ¿Cómo estuvo? Tengo el coxis en la mano… esto tuvo secuelas en mí, pero fue precioso“, contó a Página 7.

“Hay susto también, si la mayoría de la gente anda con montura, y yo por lo menos siempre lo había hecho así hasta ayer”, añadió.

“Aprendí y después me las di de chora y me mandé una carrera. Bien entrete, pero ahora estoy a penas sentada, con el cachete apoyado de lado”, concluyó entre risas.