Este lunes 24 de enero, Canal 13 reestrenó su clásica teleserie Cerro Alegre, emitida originalmente el año 1999, protagonizada por Jorge Zabaleta, Francisca Merino y Paz Bascuñán.

Tras los éxitos de las retransmisiones de Brujas, Machos y actualmente Adrenalina, la estación puso en sus pantallas la historia ambientada en la quinta Región, y que partió ad portas de la noche de Año Nuevo del año 2000 en Valparaíso y Viña del Mar.

El conflicto principal comienza con la llegada al país del actor chileno que triunfa en Hollywood, Adriano Ferrer (Cristián Campos), quien irrumpe en el baile de máscaras a beneficio que organiza la familia Thompson en esa fecha.

Lo cierto es que, ya en su segunda emisión, Cerro Alegre logró ganar el primer lugar de rating en su horario, con 8.2 puntos contra 7.6 de Mega, 7.5 de Chilevisión y 4.5 de TVN.

Además, según indicaron fuentes de Canal 13 a Página 7, fue el segundo programa más visto del canal en el día (después del estelar Aquí se baila).

Cerro alegre
Cerro Alegre | Canal 13

El beso del amor eterno

A la exclusiva fiesta llegaron también, desde los cerros de Valparaíso, Mauricio Méndez (Jorge Zabaleta) y Heidi Astudillo (Paz Bascuñán). Esta última le robó una entrada al Padre Camilo (Jorge Yáñez); y aunque quiso entrar al baile, su pololo la terminó traicionando e ingresó solo él, debido a que la invitación que tenían era para una persona.

Al interior de la casona de los Thompson, el actor callejero tenía la intención de conocer de cerca a su ídolo, Adriano Ferrer, quien también llegó hasta la fiesta con un gran objetivo: contar, delante de todos los invitados, que en el pasado él fue humillado por esa familia y no se le permitió vivir su amor con Alexandra (Sandra O´Ryan).

Esto provocó un caos total y la profunda ira de la matriarca de este clan, Raquel Thompson (María Izquierdo).

Tras el escándalo provocado por Ferrer, Mauricio conoció a Beatriz León (Francisca Merino) y quedó encantado con ella, a tal punto que quiso cumplir la leyenda del “beso de amor eterno” junto a la joven.

Esta última dice que, si una pareja se besa a las 12 en punto de la llegada de un nuevo milenio, estarán juntos por siempre.