Hace unos días, y a través de su cuenta de Instagram, Tatiana Merino reveló que está viviendo un difícil momento personal debido a la pandemia: su madre estaba hospitalizada tras contagiarse de COVID-19.
“Me he sentido con tantos sentimientos, he pasado por tantos estados: devastada, triste, enojada, confiada, con rabia, asustada, esperanzada…“, comenzó escribiendo en una publicación.
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Recordemos que la actriz está radicada en Australia, país que atraviesa el peor momento de esta pandemia. A pesar del adverso panorama, Merino admitió tener fe en que su madre mejoraría.
“Gracias a Dios que mi madre estaba vacunada y es lo que la ha ayudado a que no sea peor”, comentó en aquella oportunidad.
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Le dieron el alta
Y al parecer su optimismo surtió efectos en la salud de su madre Nilda, folclorista conocida como La Pirilacha, ya que fue dada de alta. Así lo dio a conocer Tatiana en conversación con Las Últimas Noticias.
“Ella ha evolucionado bien. Antes apenas podía hablar y a ella le encanta expresarse y conversar. En los momentos en que estuvo más complicada, nunca perdió la sonrisa. Ella es tan luchadora, positiva, una que está acostumbrada a verla bien, que verla respirando mal, sin poder hablar, fue duro“, reconoció.
Asimismo, contó cómo se sintió cuando se enteró del complejo cuadro que enfrentaba su madre. “Cuando surgió la palabra COVID-19 sentí como si me pegaran un combo en el estómago. Mi mamá tiene mucha fuerza, pero era parte del grupo de riesgo”, afirmó.
“Me preocupé mucho, me las lloré toda cuando supe que era positiva. Creo que me bajaron hasta las defensas, me sentí débil”, agregó, señalando que por la irresponsabilidad de una persona su progenitora se contagió de coronavirus.
“Andaba preocupada y estaba con mucha rabia también. Después de tenerla tan resguardada, tan bien cuidada, bastó una persona que no se cuidó, que no creía en la enfermedad, para contaminarla”, cerró.
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