La noche del miércoles se vivió una nueva competencia en El Discípulo del Chef, instancia en la que el equipo rojo resultó perdedor. Por lo mismo, el chef Sergi Arola tuvo que tomar la difícil decisión de eliminar a un miembro de su equipo.

Si bien el español había determinado que sería Víctor Díaz quien se fuera del programa culinario, finalmente Fabricio interrumpió el momento para anunciar que se retiraría de manera voluntaria, dejándole su puesto al ‘Zafrada’.

Pero las eliminaciones no son lo único que comentan los televidentes en redes sociales, ya que desde el estreno del estelar por las pantallas de Chilevisión, hay una crítica que se ha repetido constantemente, dirigida sobre todo a las participantes femeninas del espacio.

Hoy en día, las mujeres en competencia son Patricia López y Marilú Cuevas por el equipo verde, Nicole Moreno y Kenita Larraín por el equipo rojo, y Gala Caldirola con Jacqueline Pardo por los azules.

Higiene en la cocina

Desde que inició el programa, son varios los televidentes que han reparado en el hecho de que las discípulas no siempre llevan el pelo recogido.

Incluso, a veces la cabellera se les va hacia adelante, arriesgando que toque la comida que están preparando, pues casi todas tienen el pelo muy largo.

A eso se suma también el uso de accesorios metálicos que no se quitan para cocinar, ya sean anillos, pulseras o relojes.

El discípulo del chef
Captura | CHV

La crítica se repite porque a muchos les parece derechamente “asqueroso” este comportamiento, pues la posibilidad de contaminar los platos es bastante alta.

Recordemos que hace solo un par de capítulos ocurrió en MasterChef Celebrity que los jueces detectaron un pelo en el pastel de jaiba que habían preparado algunos aspirantes, situación que los dejó sin posibilidades de ganar el duelo por equipos.

Durante la emisión más reciente de El Discípulo del Chef, solo Kenita Larraín y Gala Caldirola tenían el pelo completamente tomado, mientras el resto de sus compañeras lo llevaban suelto o semirecogido.