La destacada actriz Aranzazú Yankovic lleva varios años alejada de las teleseries y en conversación con el programa online Reyes del Drama, confesó que no tienen pensado regresar.

La última teleserie en la que participó fue Chipe Libre de Canal 13, en 2014. Tras ello rechazó ser parte de la tercera entrega de Soltera otra vez. “Creo que a esta edad es más difícil (que me llamen). Bueno, también me embaracé. Tuve una guagua. Como que he estado medio fuera de las pistas”, dijo.

“Recién cuando la pandemia empezó, yo estaba volviendo a flotar. Pero no creo que yo vuelva a hacer teleseries, no me dan muchas ganas. A menos que me pagaran algo que no me van a pagar, pero creo que es súper esforzado. Me carga esperar. Seis horas, cuatro horas. Me mata, no me gusta. Menos a esta edad. No creo que vuelva a hacer teleseries”, aseguró la también docente y directora teatral.

Respecto a cómo ha logrado sobrellevar la pandemia y el encierro, la actriz aseguró que si no hubiese sido madre, el panorama habría sido muy distinto. “Estaría echada en mi cama, viendo tele, comiendo y llorando todo el día”, manifestó.

“El gobierno lo ha hecho mal, no hay ningún apoyo respecto a esto. Respeto que los actores se quejen pero creo que el problema es mucho más transversal que la cultura, es terrible para todos. Una desgracia mundial”, agregó.

“Puso temas que nadie hablaba”

Aranzazú debutó en televisión en el año 1996 como parte del elenco de Adrenalina, donde tuvo uno de los roles centrales: Sandra Villagra.

Posteriormente vinieron Playa Salvaje, Marparaíso y Corazón Pirata. En 2003 destacó en Machos, fenómeno que se toma actualmente las tardes de Canal 13 y que está en los últimos capítulos.

Hoy Canal 13 reestrenó Adrenalina. Sobre esta producción, Yankovic señaló: “En la pandemia ha sido difícil grabar teleseries, así que está bien que repitan. Éramos muy jóvenes, no sé si la vería porque me da mucha vergüenza verme”.

Sobre las temáticas de Adrenalina tras más de 20 años de su primera emisión, la actriz realizó un paralelo con la realidad actual: “Seguramente si uno la ve debe estar media añeja de look y cámaras, pero creo que las temáticas son súper clásicas”.

Hay cosas que continúan como el bullying, se puso más heavy la vida”, reflexionó.

Además, la actriz recordó la censura que sufrió la teleserie en su época. “No sé si fue la Iglesia o algún grupo más conservador, yo tenía 20 años así que nadie me explicaba nada”.

“No estábamos envuelta en el área de los jefes. Hay una escena donde salíamos con sostenes sexys y fue censurada. Escenas de Guido Vecchiola consumiendo drogas. El problema era que les entraba plata, entonces entre la plata y lo conservador les quedó la escoba“, confesó.

Sobre el éxito de Adrenalina y la Reinas de la Noche tras más de dos décadas, Aranzazú opinó que tiene mucho que ver con la apertura de temas que se mostraron en esta producción.

“Pusieron en el tapete temas que nadie hablaba como los conflictos entre padres e hijos. Nunca pensamos que 25 años después se iba a seguir hablando de esta teleserie, lo encuentro súper lindo y tierno”, comentó.

Por otro lado no cree que una teleserie tenga la función de educar al espectador. “Me parece súper importante no evangelizar a la gente”, expresó.

“Me volví un poco loca”

Sobre la amistad que traspasó la pantalla entre las cuatro reinas de la noche, Yankovic confesó que “tenemos un WhatsApp de las cuatro, pero yo soy las más apartada. Soy como la más fome, me junto menos pero las quiero mucho. Tenemos una relación como de compañeras de colegio”.

Sobre la pregunta respecto a que las repeticiones de teleseries, detalló: “Yo creo que está en crisis, la televisión se alejó del público. No hay empatía con el espectador. Las historias no son tan potentes, faltan guionistas”.

También Yankovic manifestó que luego de su primera teleserie atravesó una profunda crisis personal que la llevó a cuestionarse su trabajo en televisión. “No me parece sano que uno dependa de las teleseries, de que te llamen o no. Es muy arriesgado depender laboralmente de eso”.

Aranzazú comentó que luego de Adrenalina, decidió terminar su carrera y empezar a hacer teatro y otras actividades fuera de la TV. Rechazó el protagónico de Marparaíso (en el rol que fue asignado posteriormente a Paz Bascuñán) y en Playa Salvaje se obsesionó un poco con el peso.

“Una se vuelve un poco loca al principio en la tele. Yo me volví un poco loca, te obsesionas con cosas…me rallé la papa y quería ser la más flaca de todas. La presión y la fama era súper heavy. Yo no lo pasé tan bien, me puse meda fóbica. Querer ser flaca fue querer agradar. Por suerte, me duró poco”, reflexionó.

“Creo que hay mucho abuso”

Sobre el bullado caso de Herval Abreu, Yankovic aseveró: “Fue súper complejo porque hay una zona gris en el mundo. Quizás una actriz tiene muchas ganas de hacer algo y el director puede leer eso como ganas de él o ganas de hacer algo en un mundo muy egocéntrico. En general, los actores somos bien egocéntricos. Yo no iría a la casa de alguien en la noche a ensayar. Es una zona gris súper difícil de evaluar”, reflexionó.

Por otro lado, comentó que “en Chile queda mucho trabajo respecto a esto, la sexualización de la mujer. Entre que tienes que estar mina y ‘coquetear’ para grabar. Hay todo un círculo vicioso que es parte del show business. Me parece que las escenas que ensaya Herval en su casa, no me parece.

“Yo jamás ensayaría una escena así entre un hombre y una mujer. Eso yo lo considero. Pero quién soy yo. No soy la ley. Creo que hay mucho abuso, pero todo puede ser visto de dos ámbitos y eso es muy difícil. Me parece importante que pasemos por esta crisis para parar los abusos”, concluyó.