Tatiana Farkas fue la primera hija del magante chileno en captar la atención de los medios de comunicación locales, tanto así que su figura ha sido tan popular que en ese entonces se convirtió en rostro de una multitienda.

Y si bien no vive en nuestro país, Tati sigue conectada con sus seguidores locales a través de su cuenta de Instagram, donde posee más de 200 mil fans y acostumbra a escribir en español junto a cada registro.

Es así como nos enteramos que a mediados del mes pasado, la joven de 21 años lanzó su propio libro de poemas titulado Mirar hacia la luz es una plegaria, editado por Editorial Planeta y que ya está a la venta.

En conversación con La Cuarta, Tatiana contó que la literatura siempre ha sido su vía de escape, de hecho, confiesa que “mis primeros escritos claritos son de cuando tenía siete años”, por lo que “siempre fue un tipo de expresión súper íntimo para mí”, agrega.

Respecto a cómo se toma el proceso creativo, señala que “trato el papel como si fuera mi amiga y por eso empiezo cada escrito con: ‘Querida Amiga'”, señala.

El poemario de 100 páginas reúne textos escritos entre 2014 y 2020, y en ellos aborda temas tan complejos e íntimos como la salud mental y los cambios que ha enfrentado en el camino hacia la adultez.

“Durante mis años más difíciles soñé con tener y leer un libro que simplemente me entregara la experiencia del dolor humano, sin dar lecciones sobre cómo mejorar y sin esa irritante voz superficial que a menudo se encuentra en la literatura”, revela.

Por lo anterior, asegura que esta obra pretende acompañar a quienes a veces se sienten perdidos o solos en el mundo. “No quería que fuera un libro superficial o un libro estéticamente lindo (…) quería soltar todo muy íntimamente para poder interactuar con las almas de la gente”, afirma.

Es por eso que cuando tuvo que reunir los distintos escritos que la han acompañado estos últimos seis años, tuvo su dificultad. “Leer todos mis diarios de forma seria, clara y estable fue súper duro. Cada etapa del proceso demora mucho tiempo y mucho corazón”, cierra.