Un accidentado inicio jornada tuvo este miércoles Julio César Rodríguez, luego que se reventara la rueda de su auto cuando se dirigía al canal. Por lo mismo es que tuvo que comenzar Contigo en la Mañana desde la calle.
“Anduvimos como dos kilómetros dentro de la Costanera Norte, a un kilómetro por hora. Un suplicio. Creo que la rueda murió”, explicaba el periodista en pantalla, sacando a relucir su faceta de notero, entrevistando a los transeúntes que circulaban por el lugar.
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¿Dónde fue esto? En los alrededores del Barrio Bellavista, en la comuna de Recoleta, donde una residente le ofreció su ayuda para llegar al programa. Se trata de Jenny Pinto, una mujer de 58 años, que llevó al comunicador en su vehículo hasta las instalaciones ubicadas en Machasa.
Luego de cumplir con su objetivo, Julio César le hizo un extenso recorrido por el canal, llevándola al set de Yo Soy, el área de recursos humanos, administración y el casino, donde incluso compartieron un desayuno.
Cómo se enteró de todo
Jenny repasó junto a Página 7 toda esta experiencia la que calificó como una locura. “Estaba en mi casa, pronta a irme a la oficina y mi pareja me dice por WhatsApp ‘ponga el CHV, porque Julio César había pinchado en la autopista y había salido a la altura de Purísima, justo frente al edificio donde yo vivo”, comienza explicando a nuestro medio.
La mujer sintonizó el canal y cuenta que “veo a una comadre en la ventana saludándolo (a Julio César) del piso 16. Era Marcela, una amiga. La veo y la llamo por teléfono y le digo ‘¿qué estás haciendo en la ventana?’ y me dice ‘es que está Julio César que quedó en panne’. Ahí le dije ‘ah no, si se quedó en panne yo lo lo voy a dejar a su trabajo, ¿cuál es el problema?’“.
Después de eso no hubo vuelta atrás. Jenny cuenta que le habló a una chica que andaba con el animador y le dijo que se ofrecía a llevarlo hasta CHV, a lo que accedieron.
“Mi pareja me dice por WhatsApp ‘oiga, usted se volvió loca’. Y yo le digo ‘parece que sí’. Yo cumplo lo que ofrezco, si yo lo ofrecí, lo voy a dejar”, cuenta que le dijo a su esposo, agregando también que no tenía idea dónde quedaba la estación privada.
En el canal
Cuando finalmente llegaron, cuenta que ella se aprestaba a irse, cuando la invitaron a que bajara para que pudiera despedirse. Pero estaba lejos de eso, ya que ahí comenzaría el largo recorrido del actual conductor de Pero con Respeto.
“Dejé el auto con las ventanas abajo, el celular adentro, la cartera en la maletera. Me olvidé del mundo. Entré al canal, recorrí todo, Julio César me mostró todo el canal. Terminé después tomándome un cafecito con Julio César. No lo puedo creer”, cuenta, aún sorprendida de lo que vivió.
Respecto a qué conversó con el también locutor de radio Biobío, dijo que le había contado que era divorciada, que tenía un hijo y que trabajaba en una empresa de comunicaciones. “Fue súper amoroso. Si no lo hubiera venido a dejar yo, más de alguien lo hubiera hecho. Si no era yo, era otra”, dice entre risas la mujer que ejerce como secretaria.
Asimismo, contó que jamás había entrado a un estudio de televisión: “Primera vez en mi vida. No soy de andar pidiendo autógrafos, ni yendo a dejar a la oficina a ningún famoso, no acostumbro a hacerlo”, dice con humor, el mismo que ocupa para aclarar que “tampoco le puse un miguelito a Julio César para que quedara en panne frente a mi casa”.
300 mensajes de WhatsApp
Jenny se declaró fan del matinal de CHV, sobre todo durante la pandemia: “Encontrábamos que era mejor que los otros, porque los otros se ponían medios faranduleros y me aburrían un poco“, confiesa.
Respecto a su mediática travesía, Jenny revela cuál será la impresión de su hijo cuando la vea: “Me va a matar, me va a decir, ¿se volvió loca?’. De verdad enloquecí un poco, pero ya lo hice”, relata. Pero hubo otra sorpresa que se llevó cuando volvió a coger su celular.
“Lo miré, porque lo había dejado en silencio cuando estaba en el set y tenía como 300 WhatsApp, de verdad fue una locura. En la oficina todos estaban muertos de la risa. Nunca se imaginaron algo parecido”, afirma a nuestro portal.
Por último, Jenny cree que seguramente aparecerá en el video con chascarros que su empresa organiza a fin de año. “Le dije a uno ‘yo sé que este año me van a garrar para el chuleteo con esto’. Y me respondió: ‘¿este año? Jenny, esto da para varios años’“, sentenció.
