Fue en 2008 y tras el éxito de la primera temporada, cuando Canal 13 estrenó el dating show Amor Ciego 2.
En dicha instancia la fotógrafa Angélica Lillo participó como una de las princesas, siendo eliminada al inicio del programa. Pero, ¿qué fue de ella?
Desde Chipre la joven conversó con Página 7 y reveló detalles de su nueva vida en el Mediterráneo.
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“Después del reality estuve viajando fuera de Chile, pero no me fui del país completamente. Entre eso seguía trabajando con agencias de modelos y tuve la oportunidad de abrir una propia“, recordó Lillo sobre la decisión que tomó en 2012.
En ese entonces Angélica se desempañaba como booker, trabajando con modelos en el mundo de la publicidad, la moda y el entretenimiento.
De ese modo, aprovechando su habilidad para hablar portugués e inglés, comenzó a contactar a modelos para que fueran parte de su propia agencia “Vanity Models”.
“Partí con aquellas que conocía y que la mayoría eran mis amigas. También tenía varios amigos famosos que me ayudaron en ese ámbito”, comentó, destacando que al poco tiempo tuvo mucho éxito.
Encontró el amor y dejó Chile
En ese transcurso Angélica conoció a su pareja, un joven danés que había llegado a Chile por su trabajo en una empresa de naviera.
“Estuvimos un año pololeando, pero él después se tenía que volver a Chipre, donde está el negocio de su familia, de navieras, barcos, hoteles, etc”, señaló Lillo.
Fue así como impulsada por el amor, la joven decidió irse a vivir al Mediterráneo junto a su novio, donde ya lleva 7 años.
Cabe señalar que la exchica reality ya había vivido en otros países como Brasil y Francia, pero por menos de un año. Por ese motivo reconoció que si no hubiese sido por su pareja, jamás habría tomado la decisión de dejar su país.
“Mi novio ama Chile, eso es súper importante. Ama todo, de norte a sur. Para mí fue lo primordial”, destacó sobre el joven con el que está comprometida.
Asimismo, para seguir conectada con su trabajo, decidió abrir una sede de su agencia de modelos en Milán y otra en Copenhague. “Mi novio es nacido y criado en Dinamarca, entonces para mí era fácil entrar a ese negocio”, admitió.
Actualmente trabaja con todas sus agencias a nivel nacional e internacional, de forma telemática. “Por eso abrí este negocio, porque siempre pensé que iba a vivir en el extranjero”, destacó.
“Siempre hay que arriesgarse”
Por otra parte, Angélica reconoció que no se arrepiente de su decisión dejar Chile. “Si bien al principio estaba nerviosa, ya tenía el training de vivir afuera”, comentó.
Finalmente reconoció que tal vez en el pasado no habría salido de su zona de confort. “Con él fue diferente. Siempre hay que arriesgarse por algo que valga la pena”, cerró.
