En un Especial Ochentero, ‘Los Reyes del Drama’ recordaron la teleserie La dama del balcón, emitida en 1986 y sometida a una profunda censura por parte de la DINACOS (División Nacional de Comunicación Social) por incluir personajes nazis y hablar de experimentos genéticos en campos de concentración.

Estrenada en el primer semestre del año 1986, en plena Dictadura Militar, la teleserie de TVN, La Dama del Balcón es considerada una teleserie de culto, ya que contó con una trama muy novedosa para la época y sufrió la censura del gobierno militar.

Protagonizada por Loreto Valenzuela, la teleserie generó gran controversia al contener personajes que eran nazis y que hacían referencias al III Reich. Los diálogos sufrieron censura por parte de la DINACOS y fueron alterados mediante doblaje, donde cambiaban a los nazis por comunistas.

Los roles interpretados por los actores Willy Semler y Fedora Kliwadenko, fueron los que más sufrieron con esta intervención. El primero, interpretaba a Klaus Veidt, un nazi que llegó a Chile huyendo de una persecución. En el caso de Fedora, la icónica actriz ochentera fue Ester Cohen, una israelita cazadora de nazis, quien se enamoraba del rol de Semler. Ambos actores revelaron sus recuerdos tras esta experiencia.

“Es la teleserie más freak que me ha tocado hacer”

La producción ochentera escrita por María Elena Gertner trataba sobre unos experimentos genéticos realizados en el Campo de concentración de Dachau, Alemania, donde habían encontrado la ‘fuente de la juventud’. Los protagonistas traspasaron las épocas sin envejecer.

Willy Semler recuerda con mucho gusto su participación en esta censurada teleserie por los arriesgados y novedosos contenidos que presentaba: “Esa es la teleserie más freak que me ha tocado hacer en mi vida. Era como hacer una teleserie de ciencia ficción. Yo era el nazi en Dachau que comandaba estos experimientos y se había clonado así mismo para perdurar. ¡Cáchate la volaíta! Yo hacía el nazi y hacía el clon del nazi”, señala.

Por otro lado, asegura que Francisco Javier Cuadra, Ministro del Interior de Pinochet fue el responsable de mandar a cortar la teleserie y eliminar partes de la trama original: “Pidió ver la teleserie dos semanas antes que salga al aire porque le habían llegado rumores de la trama y mandó a sacar toda la parte de la trama que hacía referencia a los nazis y pidió que se transformara en la KGB (agencia principal de policía secreta de la Unión Soviética). Ahí inventaron cosas y salió al aire como un fracaso rotundo porque no se entendía nada. ¡Imagínate el nivel de paranoia!”, manifestó.

Por otra parte, Semler reflexiona: “Quizás pensaron que la gente va a comparar a la dictadura de Pinochet con los nazis. A Pinochet con Hitler”. Ante este trago amargo de la censura, Semler comenta: “Hacerla fue una experiencia alucinante. Te mueres cómo me veía vestido de nazi”.

No solo La Dama del Balcón sufrió las prohibiciones de la época, sino que todas las producciones televisivas tenían ciertas instrucciones respecto a su contenido: “Había un listado de palabras que no se podía decir: desaparecer, aborto, milico, paco o cualquier tipo de garabato. Hubo un momento en que no se podían hablar de temas sexuales, todos los personajes tenían que ser hetero. Todo muy alejado de la realidad. El melodrama cenicienta”, comenta.

“Varios actores no la pasaron bien”

En el caso de Fedora Kliwadenko, actriz que se retiró de los medios hace treinta años para avecindarse en Italia, señaló: “Para mí, de las cosas que hice en televisión, fue el mejor personaje, el que más me gustó. Mucha gente me ayudó a entenderlo bien, estudié harto. Fue una gran teleserie. Nos censuraron a todos los que éramos los judíos en la teleserie. Nos sentimos mal. Era censurado a un nivel de náuseas”.

La actriz recuerda con pesar cómo fue para todo el equipo y teoriza con que había temáticas involucradas con lo que sucedía en Colonia Dignidad: “Mucha gente se sintió tocada porque llegaban estos nazis a Chile. Por ahí iba la cosa”.

La teleserie no se encuentra disponible en la plataforma de TVN como otras producciones dramáticas de la época, sin embargo, fue retransmitida de forma íntegra y sin ediciones durante el regreso a la democracia, en 1990.