La noche de este miércoles en De tú a tú, Martín Cárcamo se trasladó hasta Zapallar, lugar donde vive el poeta y conductor de televisión, Pablo Mackenna.
En la instancia, el animador habló sobre varios temas como las 40 noches de reclusión nocturna, el mediático episodio del casino, el cáncer que le detectaron y también sobre su relación con Javiera Díaz de Valdés.
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Respecto a esto último, contó que se conocieron en la celebración del lanzamiento de su libro. La vio pasar cuando ella ya se iba, y en un impulso le tocó la espalda y le dijo que se quedara. Y se quedó. Ella tenía 23 y él 36 años.
“Fuimos a una fiesta, le dije ‘pasa a tu casa a buscar un cepillo de dientes’. Pasó a su casa, buscó el cepillo, se fue a mi casa y se quedó para siempre”, contó. Eso fue en marzo de 2006 y se casaron en diciembre de ese mismo año.
Dice que conoció a su suegra al mes, quien estaba enojada con él. “Recuerdo la primera vez que almorcé con su mamá. En ese momento me odiaba. Javiera vivía con ella”, comentó.
Sensible pérdida
Mackenna recordó el gran dolor que vivió durante su relación con Javiera. “Habíamos perdido una guagua. Me acuerdo que le escribí un poema. Mi manera de procesar muchos dolores tiene que ver con escribir”, relató.
“El poema se llama ‘Puntito’, porque fue un embarazo tubario y lo perdió de la nada. Era un micrón”. Lo lee en voz alta.
Detalla que es un poema sin pretensión más que un proceso interno de él. Cuenta que no lo lee mucho pero cuando lo hace, siempre hay alguien que se emociona y se le acerca a compartir su pérdida.
Relación con su hija
Fruto de la relación con Javiera nació Rosa en 2008. “Es lo máximo. Me cuesta imaginarme que no estuviera. Fue criada como hija única por los dos. Trato de estar harto tiempo con ella”, señaló.
Sobre su proceso de separación en 2009, el presentador de televisión comentó que al principio fue complicado, pero que hoy se lleva muy bien con su exseñora. “Eso facilita la relación con Rosa”, indicó.
Finalmente, el animador sostuvo que durante la pandemia se ha podido acercar mucho más a su hija. “Estuvo varios meses conmigo”, dijo.
