En el programa de Martín Cárcamo, Almorzando con el Rubio, el actor Paulo Brunetti confesó que varias veces lo han confundido con el modelo argentino y ‘rey de los asados’ Bernardo Borgeat. Algo que a veces se toma con humor y otras no tanto.

Y es que según el intérprete, “no hay nada más importante para una persona que su nombre, su identidad”. Así al menos se lo confesó al animador de Canal 13, relatando varias anécdotas al respecto

“¿Es verdad que te confunden con Bernardo?”, preguntó Cárcamo, según consignó Glamorama, a lo que Brunetti sinceró: “Todo el tiempo. Es más, hay que gente que viaja y el otro día me mandaron una foto no sé de qué parte de Italia, donde una calle se llama Bernardo y me mandaron la foto a mí. No sabe que me llamo Paulo Brunetti, que no soy Bernardo”.

El actor aseguró que Borgeat también está al tanto de esta confusión y ambos se lo toman con humor. “El otro día me invitó a su programa que hace, y pucha, justo tengo mi programa ese día. Pero hubiese estado bueno como para decirle a la gente. Ahora, más de uno se muere porque va a decir ‘¿cómo? ¿son dos?’“.

Claro que no siempre es motivo de risa, como una vez que estaba en el ascensor del edificio donde vive y entró una joven con su madre, y la señora, que no vivía allí, le dice: “‘Me encanta La Jueza’ (por Carmen Gloria Arroyo, pareja de Borgeat). La hija la mira y le dice ‘mamá, no es Bernardo, es el actor’. ‘Sí, y yo soy hueona’, dijo la señora. Se fue feliz porque había visto a Bernardo. Ahora, no nos parecemos en nada”, relató.

Hay veces que me enojo, les digo ‘me llamo Paulo Brunetti’. No hay nada más importante para una persona que su nombre, su identidad. Les digo ‘no tengo nada que ver’“, agregó.

Pero sin duda una de las anécdotas más insólitas que vivió tuvo lugar en un bar donde estaba con amigos sentados en la barra. “Había dos flacos que miraban y decían ‘hola, hola’. Yo estaba haciendo una teleserie con Sigrid Alegría y me dice: ‘Siempre te tocan las mejores. Sigrid Alegría, Fernanda Urrejola y llegas a tu casa y tienes a La Jueza’. ‘¡¿Qué?! ¿Cómo? Pero por Dios’”, contó mientras Cárcamo soltaba una carcajada.

Tantas son las veces que ha ocurrido que incluso ha tenido que mostrar fotos suyas y de Bernardo para que la gente note la diferencia, aunque frente a sus amigos, ya se rindió. “Mis amigos ya me gastan, soy el de hacer el asado entre los amigos y me dicen ‘Bernardo, ¿falta mucho…?’”, remató.