Simón Pesutic conversó con Jordi Castell, en el programa El Aperitivo, sobre cómo vive su cuarentena, su relación de pareja y su trabajo.

Respecto a lo último, el actor contó -en la transmisión de @revista_velvet- que tenía varios proyectos cuando llegó la pandemia y sintió frustración por no poder llevarlos a cabo, pero estar con su polola, Valentina Oyarzún, lo ayudó a manejarlo.

“Me pilló con ella, así qué mejor compañía. Pero no en las mejores circunstancias, en términos que tenía un par de proyectos que se iban a concretar en abril o a más tardar en mayo, y se cayeron, y por supuesto que hay una frustración. A todos nos ha afectado en momentos laborales o personales, no tengo mucho porqué quejarme en realidad. (Los proyectos) pueden todavía ver la luz, en algún minuto”, comentó.

Además, cree que vamos a tener que acostumbrarnos a una nueva vida después de esta cuarentena: “Qué va a pasar después de esto, es una interrogante que me hago. Por los rebrotes, yo creo que nos vamos a tener que acostumbrar a que cada cierto tiempo vamos a tener que volver para la casa de nuevo, pero sí me ha dejado aprendizajes esta pandemia, este bicho”.

Según comentó, la enseñanza más importante que le ha dejado esta pandemia ha sido conectarse con el aquí y el ahora y a ser más tolerante con respecto a la frustración.

“Conectarse con lo que está sucediendo, a mí me pasaba antes de esto, que yo sentía que el mundo vivía con trastorno de ansiedad y a mí me costaba mucho insertarme en esa vorágine de inmediatez, de exitismo. Esta pausa me fue muy necesaria, un poco para conectarme. En este minuto es imposible planificar algo, sólo somos dueños de lo que está sucediendo ahora. Esto me ha servido mucho en ese sentido y a tener la capacidad de ser más tolerante con respecto a la frustración. Siempre me había tocado bailar con la bonita, y hay que asumir que no siempre es así”, expresó Pesutic.

Con respecto a sus papeles de galán en teleseries, reconoció que le incomoda interpretarlos porque no se siente así en la vida real: “A mí me queda muy incómodo el rol de galán, porque tengo la capacidad de verme desde afuera y de ver las relaciones que tengo desde afuera, y no me siento como un galán, ni mucho menos. Es parte de mi trabajo, trabajar con redes sociales, estar conectado con la gente”.

Simón también habló de su padre, el reconocido actor Mauricio Pesutic, contando que al principio le costaba tener ese peso de ser el “hijo de”, pero que después lo fue agradeciendo: “Al principio me costaba un poco tener ese peso, pero después en el corto tiempo lo agradecí, me sentía más bien orgulloso que otra cosa. Ya ni siquiera vivo con eso, ya es parte de mí”.

Sobre la actuación, recordó que cuando comenzó estaba en el último año de colegio: “Estaba en el colegio y me metí en la cabeza que quería estudiar teatro, di una prueba y me fue súper bien, salí primero, y me tocó dar la PSU y justo hice un casting para TVN y me llamaron para Pobre Rico (2012), como protagonista; opté por hacer la teleserie y postergué la carrera. Después uno se acostumbra a la independencia económica”.

Finalmente, Simón aseguró que le encantan las comunicaciones y que está abierto a muchas posibilidades dentro del mundo laboral: “Yo viví un proceso muy rápido, recién ahora debo confesarlo, me estoy haciendo un montón de preguntas, ¿qué es lo que realmente me hace feliz? En el plano laboral, he descubierto que el mundo de las comunicaciones me gusta mucho, hoy en día estoy abierto a muchas posibilidades que antes no, estoy haciendo radio”.

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