Marcela Vacarezza y Rafael Araneda se sumaron este jueves a la conversación en Sigamos de largo, desde su casa, donde recordaron los hechos delictuales que los han afectado.

En este contexto, la psicóloga contó que hace poco tiempo, cuando debió salir en medio de la pandemia vivió un dramático episodio. Le hicieron una encerrona a eso de las 19 horas.

“Tuve la opción de poder chocarlos y salir hacia la izquierda y ahí tomé por Costanera Sur hacia arriba, muchas cuadras, pero partieron atrás, persiguiéndome durante mucho rato, hasta que Costanera Sur se transforma en Monseñor Escriva de Balaguer”, relató Marcela.

La esposa de Rafael explicó que “son reacciones que uno nunca sabe, yo siempre he dicho ‘si me llegan a encerrar yo entrego el auto’, pero en ese minuto vi la opción de chocar el auto y poder salir, pero ya en la persecución, porque fue una persecución, yo no sé a cuánto iba. Era muy peligroso pero me dio mucho susto también porque yo dije ‘si me llegan a agarrar ahora, son capaces de matarme porque además vienen picados’“.

Sergio Lagos le preguntó si había sufrido algún tipo de lesión por el impacto y ella dijo que afortunadamente no.

Marcela Vacarezza y Rafa Araneda en Sigamos de largo
Captura | Canal 13

Más adelante, el conductor del late de Canal 13 le preguntó al matrimonio si “con el paso del tiempo van sintiéndose más tranquilos o la sensación de temor permanece”.

Marcela fue enfática: “Permanece, así por lo menos en mi casa. No es el temor que te paraliza. Después de lo que me pasó en el auto vuelve el temor, pero antes del temor uno anda precavido, anda como más atento. Vez que uno llega a la casa se fija si viene alguien atrás”.

“De hecho, mi hija más grande, que anda en auto de repente, también si ve que alguien viene atrás sigue de largo, se da una vuelta. Uno toma precauciones que antes no las tenía. Yo ahora cuando vuelva a salir, cuando tenga la posibilidad, voy a andar de nuevo con temor, fijándome en los cruces, en el auto de al lado”, añadió.

Según contó, “antes me estaba fijando solamente cuando llegaba a la casa, porque habíamos vivido el portonazo, pero ahora es en todas las calles”.

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