De seguro te emocionaste la primera vez que viste la película italiana La Vida de es bella, estrenada en 1997. Sin embargo, la producción ambientada en los tiempos del Holocausto Nazi, no sería nada sin el adorable personaje del pequeño Giosuè Orefice.
El actor Giorgio Cantarini interpretó al tierno niño que quedó grabado en el inconsciente colectivo de los espectadores. Tenía cinco años cuando después de un duro casting, Roberto Begnini lo contrató para interpretar al hijo de Guido Orefice.
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“Vi la película varias veces a medida que crecía y cada vez que la veía, notaba algo diferente. No conocía los temas de la guerra, el nazismo (…) Ahora que soy un adulto, es extraño porque no recuerdo a ese niño“, expresó en entrevista con el medio italiano Onsefaituncine en 2017.
En cuanto a su padre en la ficción, reveló que siguen en contacto a pesar de los años. “Tenemos muy buenas relaciones. Por ejemplo, hice un cortometraje este año, me envió su opinión y me llamó para felicitarme”, precisó.
A 23 años del fenómeno cinematográfico, el actor vive entre su Florencia natal y Los Ángeles, donde reside su madre. Asimismo, a través de su cuenta de Instagram, muestra sus nuevos proyectos.
Cabe destacar que Giorgio trabajó en dos películas merecedoras de un Óscar en Hollywood: en 1997 como parte del reparto en la citada La vida es bella y por Gladiator del año 2000.
Un año más tarde, el joven apareció como Slavko en la película de televisión estadounidense En el amor y en la guerra, adaptación de la novela autobiográfica Guerra en los Apeninos de Eric Newby. La producción fue merecedora de un premio en el Salón de la Fama de Hallmark.
Pero Cantarini no solo se dedicó a la actuación. En 2005 compitió en la versión italiana de Ballando con le stelline (Bailando con las estrellitas), emitido por el canal Rai Uno.
En su adolescencia, el actor participó en otras películas de su país natal, como Il giorno, la notte, Poi l’alba, Il mattino ha l’oro in bocca, y Distretto di polizia.
Cabe señalar que estudió en el Centro Experimental de Cine de Italia. “Me gusta ser actor, pero ser director es algo que también me atrae. Sigue siendo un sueño por el momento porque ya no es fácil ser actor, por lo que los dos son aún más difíciles. Hice un cortometraje con mi novia y realmente es algo que me gustaría aprender”, reconoció al medio italiano.
Según destaca el medio internacional GQ, paralelamente a su carrera cinematográfica, forma parte del elenco de varias obras teatrales. Asimismo, vive un bello romance con una actriz, con quien comparte fotografías en redes sociales.
