Los niños siempre quieren ser como los padres. Tratan de imitarlos y de adoptar las mismas prácticas, hábitos y hasta el modo de hablar que tienen los progenitores, incluida su apariencia.

Precisamente eso fue lo que le sucedió a la famosa cantante Pink con su hija Willow, de ocho años, quien a pesar de su corta edad, no dudó en imitar un característico look de su madre: se rapó una parte de la cabeza.

Así lo reveló una imagen compartida por el esposo de la artista, Carey Hart, en el cual se ve a la pequeña sentada en un salón de belleza con su parte izquierda de la cabeza rapada, mientras la estilista afina otros detalles de su caballera.

“Recuerda, lleva tu propia bandera. Nadie te puede encasillar. Es mejor ser tú mismo, vivirlo y quererlo. Y si alguien tiene algún problema con ello, diles (de manera educada) que sigan su camino. Estoy deseando ver en qué mujer te vas a convertir. Tengo la sensación de que vas a ser fuerte, guerrera, compasiva y cariñosa. Estoy muy orgulloso de ti”, escribió el padre de Willow.

La actitud de la niña fue elogiada en redes sociales, como también la forma en que Pink y Hart, están criando a su hija, desde una perspectiva de libertad respecto a su apariencia.

“Eres como tu mamá. Eres hermosa y me encanta que no te importe lo que piensan otros niños”; “Me encanta que hayas dicho eso (cortésmente). Todos tienen opiniones diferentes pero no tenemos que ser groseros al respecto”; “Familia fuerte, criando niños fuertes”; “Amo a cualquiera que esté criando chicas fuertes, inteligentes e independientes, que estén totalmente cómodas con su propia piel”, fueron algunos de los mensajes.

Cabe mencionar que la pareja se casó en 2006 y cinco años después tuvieron a su primera hija, Willow. Ya en diciembre de 2016 llegó el más pequeño del clan familiar: Jameson Moon.