El cantante coreano Park Jae-sang (41), más conocido por su seudónimo artístico PSY, se hizo mundialmennte conocido tras la publicación de su single de música electrónica Gangnam Style en el 2012, año en que su videoclip llegó a ser lo más visto en YouTube.

El hombre no sólo se posicionó como el número uno en las listas de Corea del Sur con el popular estribillo ‘Oppa Gangnam style’, sino que se convirtió en un fenómeno que dio la vuelta al mundo, llegando a ser reconocido también en todo Occidente.

Según información entregada por el portal de noticias Hollywood Reporter, el artista ha vuelto a salir a la luz pública, pero esta vez, no por su música. PSY fue llamado por la policía a declarar como testigo hace algunos días debido a su cercanía con Yang Hyun-suk, quien ha sido su representante y es el fundador de la exitosa productora YG Entertainment.

Yang, el ex representante del intérprete ha sido indagado por múltiples delitos: soborno, evasión tributaria y abusos sexuales. Se le acusa de haber conseguido servicios de prostitutas para inversores extranjeros durante una comida de negocios en 2014. PSY habría estado involucrado. Sin embargo, el músico aseguró que en esa jornada, él se retiró temprano y jamás se enteró de las actividades ilícitas llevadas a cabo.

De acuerdo con el medio, la policía local aún se encuentra investigando para encontrar pruebas más sustanciosas. El fundador de la productora fue entrevistado durante nueve horas este miércoles y negó absolutamente todos los delitos por los que se le imputan.

Cabe destacar que recientemente se ha generado un verdadero terremoto en la industria del K-pop, luego de que saliera a la luz un escándalo sexual, en que habrían estado involucrados varios músicos de este género. Luego de esta situación, los acusados anunciaron su retiro del mundo de los espectáculos.

Jung Joon-young (30) y Seungri (29), dos importantes exponentes del pop coreano fueron los principales protagonistas de este alboroto. Jung fue inculpado de compartir registros de sus relaciones sexuales, sin tener el consentimiento de las parejas. El segundo hombre, por su parte, está acusado de explotación sexual.