Un emotivo momento se vivió este jueves en el Muy Buenos Días, cuando el panel debatía respecto a la ley de eutanasia. En medio de la discusión, Gino Costa intervino recordando un duro episodio que le tocó vivir junto a su familia.

El periodista confesó que su hermana fue diagnosticada de cáncer a los 28 años, cuando tenía una hija pequeña: “Mi hermana tuvo cáncer y todos nos cuestionamos qué hacer (…) Verla entubada era muy difícil. ‘¡Por qué a mí!’ decía ella”.

Relató que todo comenzó con un tumor en la nariz mal diagnosticado. Conteniendo las lágrimas, comentó que los tratamientos son “intervenciones que para evitar que se propague el cáncer tenían que destruirle la cara”.

El panelista del matinal contó que en ese momento “su sistema de salud no cubrió nada porque el cáncer estaba en un lugar relacionado con lo estético. Mi papá tuvo que vender todo para darle lo mejor a mi hermana, la mejor cirugía, en el mejor lugar, el mejor tratamiento. De esta forma nosotros le estábamos diciendo ‘vamos’ te queremos aquí, con nosotros”.

Costa reveló que “trataba de hacer cosas para evitar pensar que la muerte estaba muy cerca”. Y si ella hubiese querido morir “yo no se lo hubiese permitido. Jamás la dejaría partir. Que me perdone Dios o la ley que sea, pero no la hubiese dejado”.

Según contó el miembro del Muy Buenos Días, los tratamientos no fueron los que salvaron a su hermana, sino que fue el amor de sus papás, de su marido y de su hija. Posteriormente, al poco tiempo de terminar el tratamiento ella se enteró que estaba embarazada. “Ellos hoy son una maravillosa familia. A ella la salvó el amor”, finalizó el periodista.