Cada cierto tiempo es posible ver jugadas a lo largo del mundo que encantan en el fútbol. Claro que hay otras que simplemente sacan risas, y eso fue lo que justamente ocurrió en Inglaterra, donde se vivió una insólita situación.

Este chascarro ocurrió en el duelo entre Nuneaton y Stratford de la Southern Football League de la Central División inglesa. Cuando el marcador estaba empatado a cero, el equipo local tuvo la oportunidad de abrir la cuenta.

Quien tuvo la misión de chutear el balón fue Tony Breeden, el portero del Nuneaton. Si bien la idea era que se convirtiera en el héroe de la jornada, simplemente se convirtió en el villano, y de la peor forma. Y es que le pegó tan fuerte al balón, que este no tan sólo pasó por encima del arco, también llegó hasta la galería.

Fue ahí que uno de los hinchas, que estaba grabando todo, vio cómo el esférico llegó al techo del estadio, lo que provocó que un foco se destruyera y cayera desde la estructura.

Lejos de provocar el enojo de los fanáticos, fueron risas las que se escucharon desde las tribunas. Además, el resultado final terminó 2 a 0 a favor del Nuneaton, por lo que el penal fallido fue solo una anécdota.

De todas formas, la jugada se volvió viral y ya muchos catalogan este momento como ‘el peor penal de la historia’.