Ellen Pompeo, histórica protagonista de la serie médica Grey’s Anatomy, admitió recientemente que las acusaciones de abuso laboral que realizó Katherine Heigl hace 13 años eran “absolutamente correctas”.

Según consignó Fox News, la intérprete de actuales 51 años hizo esta revelación durante una conversación con Kate Walsh -otra actriz de la serie- en el podcast ‘Tell Me with Ellen Pompeo’.

“Recuerdo que Heigl dijo algo en un programa de entrevistas sobre las locas horas que trabajábamos, y tenía 100% de razón”, aseguró Ellen.

Durante una entrevista con David Letterman en el 2009, la actriz que daba vida a Izzie Stevens se quejó sobre las largas horas que se vio obligada a trabajar en una sesión del programa: “Nuestro primer día de regreso -y espero que les avergüence-, fue un día de 17 horas, que creo que es cruel y mezquino“, dijo en esa ocasión.

Las declaraciones de la estrella de Grey’s Anatomy no quedaron ahí, pues incluso valoró lo que hizo su compañera en esa oportunidad: “Si ella hubiese dicho eso hoy, sería una completa heroína. Pero se adelantó a los tiempos, hizo una declaración sobre las horas que trabajábamos y, por supuesto, ‘golpeemos a una mujer y digámosle desagradecida'”.

Además, Pompeo aseguró que Katherine era una “cojonuda. Ella estaba diciendo la verdad. Ella no estaba mintiendo”.

Abuso laboral en Grey’s Anatomy

La declaración que Katherine Heigl hizo en 2009, apuntando el abuso laboral, molestó al equipo de producción de Grey’s Anatomy.

De hecho, indicaron que la jornada de 17 horas fue necesaria porque la actriz se tomó tres días libres para hacer la promoción de la película The Ugly Truth (La cruda verdad), en la que era protagonista.

Por otro lado, su personaje fue sacado del drama médico en el episodio 12 de la sexta temporada, tras vivir varios conflictos: fue diagnosticada con melanoma en etapa cuatro, lo que afectó su hígado, cerebro y piel; pero además se divorció de su esposo Alex y dejó Seattle tras la operación.

La salida de Heigl fue muy comentada, especialmente por las acusaciones que hizo y que no fueron bien tomadas por el público. En esa época, la polémica fomentó una percepción de ella como una actriz ingrata e incluso algo diva.