La estrella de Wandavision, Elizabeth Olsen, reveló que cuando era niña pensó que tendría que cambiarse el apellido para que no la asociaran con sus hermanas famosas.
“Entendí a los diez años lo que era el nepotismo, y no tenía nada que ver con no estar orgullosa de ellas (sus hermanas, Mary-Kate y Ashley Olsen), tenía que ver con mis propias inseguridades”, admitió en conversación con la revista Glamour.
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Olsen creció en los sets, ya que acompañaba a sus hermanas a las grabaciones de diferentes producciones. Recordemos que las gemelas iniciaron en el rol de Michelle Tanner en la serie Un hogar casi perfecto.
“Tenía 10 años y tenía curiosidad por hacer una audición, y me di cuenta de que no era para mí, porque echaba de menos mi equipo deportivo, mi clase de baile y todas las actividades extracurriculares de la escuela”, comentó.
Asimismo, la intérprete de la Bruja Escarlata señaló que en los inicios de su carrera, no quería que la vincularan con sus hermanas.
“Creo que era la sensación de no ganarme algo lo que me molestaba desde esa edad. Y pensé: ‘Voy a ser Elizabeth Chase (su segundo nombre) cuando sea mayor’”, dijo.
Cabe señalar que más tarde las gemelas Olsen dejaron de lado su carrera actoral para dedicarse a la moda.
Actualmente Elizabeth vive en Reino Unido con su prometido, el músico Robbie Arnett. De igual forma, se encuentra en las grabaciones de la nueva cinta de Marvel Dr. Strange 2.
