Apasionado por la música, estricto y considerado como un ‘artesano’. Así sus cercanos describen a George Martin, un personaje que fue vital en el desarrollo y posterior éxito de The Beatles.

Su relación con el arte se inició a los seis años, cuando sus padres le compraron un piano. A tal punto llegó su interés que a los ocho pidió que le pagaran clases particulares para aprender más de este instrumento, las cuales duraron solo dos meses luego de un fuerte encontrón con su maestro y madre.

Esto no apagó su llama por la música, ya que se convirtió en autodidacta para seguir con su sueño.

Nacido en Londres, el 3 de enero de 1926, en una época donde los conflictos bélicos estaban latentes en Europa. Es así como Martin fue reclutado para la Segunda Guerra Mundial, la cual no llegó a combatir.

Ya con la llegada de la ‘paz’, George comenzó a estudiar música, trabajando en el sello Parlaphone, en donde grabó a artistas de distintos estilos, aunque su fuerte eran los discos de comediantes como Peter Sellers.

La llegada de Los Beatles

Aunque su vida tuvo un radical vuelco en 1962, el rock encantaba al público juvenil. Debido a esto George comprendió que él podía encontrar algún artista para vender una gran cantidad de discos.

En febrero de dicho año, Martin se reunió con Brian Epstein, un joven dueño de un negocio de electrodomésticos que intentaba que una desconocida banda que manejaba grabara su material.

Luego de varios encuentros durante los meses siguientes, George escuchó el demo, que lo sorprendió, decidiendo firmar con el grupo. Cabe señalar que el contrato estipulaba que las regalías constaban de un penique por disco vendido, el cual era repartido entre cuatro.

Unos humildes inicios para esta banda, que posteriormente fue conocida mundialmente como The Beatles. Pero para esto faltaba mucho.

Una de las primeras labores del productor fue darle confianza a la banda; las esperanzas estaban puestas en John Lennon y Paul McCartney, quienes para él tenían unas voces especiales.

El 6 de junio de 1962 quedó en la historia como la primera sesión de grabación del icónico grupo, donde registraron cuatro temas, pero ninguno fue considerado como un hit para Martin.

Con un sentido musical preciso, George solicitó que cambiaran de baterista, siendo su única condición para seguir trabajando juntos.

Inicialmente el productor le pidió a Paul y John que hicieran covers, lo cual no fue bien recibido. Pese a ello, los cantantes insistieron y lograron grabar su primer single Love Me Do, el cual llegó al puesto 17 de los grandes éxitos.

Es importante señalar, que George Martin había querido que su primer tema fuese How Do You Do It, el cual fue negado por la banda. El tiempo le dio la razón al productor, pues aquel sencillo llegó a la cima de la mano de Gerry and The Pacemakers. Luego de aquello, todo comentario fue tomado en consideración por el grupo.

El ascenso de Martin

Durante los años siguientes, ayudó a organizar y producir grandes éxitos de The Beatles tales como Yesterday, iniciando una fructífera relación.

Pese a que muchos intentaron quedarse con el título del ‘Quinto Beatle’, el debate de especialistas siempre llegaba al mismo punto, George Martin era el merecedor de dicho puesto.

Según detallan medios internacionales, a diferencia de los demás integrantes de la banda, el productor no era un genio, pero aquello lo suplía con oficio, experiencia y esfuerzo.

Forjado como una figura de hermano mayor, ya que no se sentía como el padre de la banda al tener una diferencia de edad de solo 15 años, se convirtió en un guía y el encargado de unir ideas de sus integrantes.

Si The Beatles cambiaron la música, George Martin hizo lo propio con el negocio, pues antes de él, los productores no se inmiscuían en el estudio. Más bien oficiaban de managers enfocados en la logística, muy lejos del proceso de creación.

Aunque la tentación estaba, jamás intentó robar el protagonismo de la banda, incluso siempre estuvo en un papel secundario e incluso invisible.

El legado

Con la separación del icónico grupo londinense, el británico prosiguió su labor con grandes artistas como Sarah Vaughn y Elton John. No por nada el Libro de los Récords Guinnes, lo consideró como el productor más exitoso de la historia, quien tuvo un Récords Guinnes al lograr 50 veces el número uno en los ranking de Estados Unidos y Reino Unido durante cinco décadas.

Su aporte llegó a tal punto que la Reina Isabel II le concedió en 1966 el título de Caballero, por sus servicios a la industria musical y cultura pop.

El 8 de marzo de 2016, a los 90 años, su vida se apagó, aunque su legado sigue vigente con un trabajo que traspasó fronteras y revolucionó la industria musical.