Fue en 2010 cuando una serie de cartas que pertenecían a Diana de Gales fueron subastadas. En los escritos, la princesa revelaba su particular obsesión con los regalos de Navidad.

En más de 30 cartas y postales, Lady Di le expresaba a su esteticista personal, Janel Filderman, que no podía resistirse a abrir sus obsequios, por lo que debía hacerlo unas semanas antes de las fiestas.

Asimismo, reconocía el temor de que su hijo Guillermo también se dedicara a abrir regalos antes de tiempo, tal y como consigna el medio español ABC.

“Tal y como te prometí, me fui corriendo a casa para abrir tu regalo de Navidad, que me pareció muy bueno ¡Considerando que todavía faltan dos semanas para el día 25!“, decía una de las cartas de la princesa, fechada el 14 de diciembre de 1985.

“No pude resistirme a abrir mi regalo, porque los paquetes de cualquier tamaño o forma nunca han estado a salvo conmigo y me temo que Guillermo también ha heredado este hábito terrible de su madre, porque me encuentro papel de regalo en los lugares más extraños”, admitía Lady Di en otro de los escritos.

En este contexto, Richard Davie, de la casa de subastas International Autograph Auctions, señaló que esta obsesión dejaba en evidencia la naturaleza insegura de Diana y “su sensación de que la prensa la perseguía”.

Esto es afirmado por una carta que la princesa escribió en 1987. “Desearía poder hacer frente a la prensa y a la sed de conocimiento de la gente sobre nosotros, pero después de seis años todo me resulta una lucha y no puedo ver la luz al final del túnel”, expresó en ese entonces.