El príncipe Harry, nieto de la reina Isabel II de Inglaterra, visitará cuatro países de África en otoño y, en una parte de la gira, estará acompañado por su esposa Meghan y el pequeño Archie, primogénito de la pareja.

A petición del ministerio británico de Relaciones Exteriores, los duques de Sussex realizarán una visita oficial a Sudáfrica en otoño, informó el Palacio de Buckingham en un comunicado sin precisar las fechas.

Este será el primer viaje oficial de la exactriz estadounidense, de 37 años, desde que el 6 de mayo dio a luz a Archie, quien tendrá unos seis meses cuando realice su primera visita.

La segunda parte de la gira será hacia Angola, Malawi y Botswana, no obstante, a este destino no asistirá Meghan ni el pequeño.

Si bien el palacio de Buckingham no ha explicado oficialmente por qué la duquesa y su hijo no continuarán en esta parte del viaje, el medio británico Mirror, asegura que existen varios factores que podrían incidir en la decisión.

Lo primero es que sería riesgoso para el bebé por el tema de la malaria, ya que si bien en la mayoría de los lugares de Sudáfrica se está a salvo de esta enfermedad, existen zonas aledañas que son peligrosas.

Este riesgo aumenta en Angola y Malawi. De hecho la Asociación Internacional de Asistencia Médica a Viajeros señala que: “El riesgo está presente en todo el país, incluidas las zonas urbanas, y en todas las altitudes”.

Otro motivo tendría que ver con el pesado itinerario que significan todos estos viajes, con varios vuelos internos, eventos oficiales, etc. Cabe recordar que Archie apenas tendrá alrededor de cinco meses cuando salga del país, convirtiéndose así en el bebé real más pequeño en salir a una gira.

En el caso del príncipe George, éste tenía ocho meses cuando Kate y William lo llevaron consigo a Australia y Nueva Zelanda.