Camila Pérez Moya, una de las siete personas que se mantenía internada en el Hospital Regional de Concepción debido a la explosión en la Clínica Sanatorio Alemán, fue trasladada la tarde del pasado lunes a Santiago.
La joven trabajadora de Starbucks, se encuentra actualmente en la Mutual de Seguridad, acompañada por sus padres y su pareja, quienes esperan ansiosos alguna noticia sobre su recuperación.
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“Camila tiene una lesión grave a raíz de la explosión que la dejó con un 43% de su cuerpo quemado, lo que es bastante complejo. Sin duda es una paciente de estado grave y por las características del accidente, de riesgo vital”, explicó el doctor Alberto Muñoz, jefe de la Unidad de Cuidados Intensivos de Grandes Quemados, al diario Las Últimas Noticias.
Según especificó el especialista, las lesiones de Camila están asociadas a heridas de alta energía provocadas por la onda expansiva de la explosión. “Las que involucra elementos como proyectiles o esquirlas, cortes de vidrio y contusiones”, especificó sobre la joven que actualmente está conectada a un respirador artificial.
“A ella no le tocaba trabajar el sábado, pero le dieron libre el viernes y le pidieron que fuera ese día (de la explosión)”, señaló Patricio Barragán, pareja de Camila y padre de una niña de un año y 8 meses, fruto de su relación.
La familia estima que si todos los procesos resultan bien, Camila tendrá que estar alrededor de dos meses más hospitalizada en Santiago.
